Lina Álvarez afirma que el 99 % de nuestras empresas son medianas, pequeñas y microempresas, y el 1 % grandes.
Sobre ese 99 % hay mayor carga impositiva.
Sobretasa de tres puntos porcentuales al sector financiero es visto con buenos ojos por sectores económicos por estar acorde con la realidad.
Lina Álvarez afirma que el 99 % de nuestras empresas son medianas, pequeñas y microempresas, y el 1 % grandes.
Sobre ese 99 % hay mayor carga impositiva.
Sobretasa de tres puntos porcentuales al sector financiero es visto con buenos ojos por sectores económicos por estar acorde con la realidad.
Lina María Álvarez, contadora pública y coordinadora del área financiera y contable de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de Uniminuto, seccional Antioquia – Chocó, afirmó en #CharlasConActualícese que ninguna reforma tributaria será popular. «Para que sea popular debe proponer una baja en todos los impuestos planteados», dice.
Recuerda que la propuesta de reforma tributaria que tumbó el pueblo colombiano cuando salió a las calles meses atrás se lanzó porque el endeudamiento en Colombia llegó en 2020 al 132,2 % del PIB.
Con esta se buscaban recaudar 23,4 billones de pesos, de los cuales 7,3 se recaudarían a través del IVA y 17 billones a través de impuestos a personas naturales.
El proyecto proponía que el impuesto al patrimonio pase a llamarse impuesto a la riqueza con una vigencia de dos años. De igual forma creaba un nuevo impuesto de normalización tributaria.
Otro de los puntos que tocaba era un impuesto temporal y solidario para ingresos altos con una tarifa del 10 % para gravar a personas con salarios mayores a 10 millones de pesos.
Tiene claro que el impuesto de renta para personas naturales creó mucha polémica porque el pago iniciaría en los 800 UVT de la base gravable con una tarifa del 10 %; es decir, se empezaría a declarar renta con un salario mensual aproximado de $2.420.000. Sobre este punto opina que «cuando las leyes salen al público, se desdibujan y existe una falla en el Estado, porque no se socializan y no hay pedagogía respecto a lo que se está planteando».
Sin embargo, lo que generó el estallido social, desde su punto de vista, fue el tema del IVA.
Hubo puntos desacertados de la propuesta, ya que las personas estaban pasando por momentos económicos muy difíciles.
El Gobierno buscaba obtener un recaudo de 7,3 billones de pesos de la mano de este impuesto, el problema es que se pretendía pasar muchos productos y servicios que estaban excluidos del IVA a que tuvieran una tarifa del 19 %, lo que fue un error muy grande.
Con el nuevo proyecto de reforma tributaria la expectativa de recaudo será de 15,2 billones de pesos. «Se espera que más del 60 % del dinero sea aportado por el sector empresarial y el 40 % restante de la lucha contra la evasión y recorte del gasto público», explica.
Enfocándose en la evasión de impuestos, Álvarez dice que al 2019 en Colombia se estimaba que por un día de evasión se dejaba de recaudar el 30 % de la meta, índice que es muy escandaloso y llevado a cifras equivale a 47 billones de pesos.
La nueva propuesta indica que en el impuesto de renta para las empresas se verá impactado al no poder descontar el 100 % del ICA como estaba planeado para el año gravable 2022. Además, la tarifa de renta para empresas tendría un incremento del 30 % a 35 % a partir de dicho año.
De igual forma la sobretasa al sector financiero de tres puntos porcentuales, por lo menos hasta el año 2025, ha sido vista con buenos ojos por muchos sectores económicos por ser necesaria y acorde con la realidad.
Álvarez afirma que esta nueva reforma tributaria busca a partir del 2023 una restricción en el aumento de los gastos de las nóminas que se financian con el Presupuesto General de la Nación.
Desmontar la burocracia en un período corto es complejo, pero se pueden hacer esfuerzos para lograrlo. Las personas no creen mucho en este tema, pero hay que ponerle una ficha de confianza.
Álvarez tiene claro que el Gobierno busca apostarle a la continuidad de los programas sociales, entre ellos Ingreso Solidario. También quiere focalizarse el empleo para la población entre los 18 y 28 años, por lo cual se busca financiar parte del salario que deben pagar las empresas.
Se busca impactar el fenómeno del desempleo en Colombia. Habrá un subsidio de 10 % de un salario mínimo para cubrir el 40 % de la seguridad social del trabajador.
Ella analiza la situación tributaria del país y dice que no se puede afirmar que Colombia es el país que más impuestos paga.
Datos acumulados indican que en países de nuestra región pertenecientes a la OCDE el 70 % de los ingresos lo ponen las empresas y el 30 % recae sobre las personas, mientras que en los países de Europa pasa lo contrario.
En Colombia la tributación por parte de personas jurídicas es del 71,90 % contra un 28,10 % de personas naturales. Precisa que el 99 % de nuestras empresas son medianas, pequeñas y microempresas, y el 1 % son grandes y multinacionales; entonces la mayor carga impositiva está puesta sobre ese 99 %.
Todos somos los que tenemos que llevar esto a flote. Esta reforma hizo unos esfuerzos grandes por ahogar la protesta social, pero a través de un camino muy facilista. Esta reforma no va a solucionar el hueco fiscal que existe.
Lo anterior se suma a que el país cuenta con el mayor índice de desconfianza en el Gobierno e instituciones. Al cierre del 2016, apenas el 22 % de los colombianos dijeron tener confianza en las obras del gobierno, mientras que el promedio en América Latina es del 36 %.
Por lo anterior es que se presenta un porcentaje muy alto en la evasión. Al no creer en el Gobierno, los contribuyentes no pagan impuestos.