La corrupción hace parte de una de las acciones que más afecta la profesión contable, pues el profesional encargado, dentro de la ejecución de sus funciones, está expuesto a muchos riesgos que finalmente subyacen en este tipo de actos, razón por la cual resulta importante conocer sus implicaciones.
La corrupción hace parte de una de las acciones que más afecta la profesión contable, pues el profesional encargado, dentro de la ejecución de sus funciones, está expuesto a muchos riesgos que finalmente subyacen en este tipo de actos, razón por la cual resulta importante conocer sus implicaciones.
Teniendo en cuenta que el profesional contable tiene la facultad de dar fe pública por medio de su atestación o firma, es importante que este sea consciente de las implicaciones o la responsabilidad que adquiere con dicho acto, pues podría verse afectado por hechos de corrupción.
Como medida para mitigar este tipo de actos han sido muchos los proyectos anticorrupción que se han radicado en el Senado. Un ejemplo de lo anterior es el proyecto 117 de 2018, mediante el cual se busca promover la probidad administrativa y combatir la corrupción a través de una serie de disposiciones, algunas de las cuales abordan puntualmente la labor del profesional contable y la responsabilidad que este asume ante este tipo de actos. En este sentido, se hace importante que además de conocer las implicaciones que traen este tipo de proyectos, los contadores públicos, cualquiera que sea su rol, asuman una conducta basada en el cumplimiento de los principios expuestos en su Código de Ética Profesional.