Liquidación de empresas nacionales, ¿cómo se está llevando a cabo este proceso?
Actualmente, muchas empresas nacionales se están liquidando y acogiendo a procesos de reorganización. Teniendo en cuenta que uno de los actores más relevantes en dicho proceso es el liquidador, y que sobre este recaen muchas responsabilidades, aquí te damos un panorama de su función.
Fecha de publicación:
18 de septiembre de 2017
Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Actualmente, muchas empresas nacionales se están liquidando y acogiendo a procesos de reorganización. Teniendo en cuenta que uno de los actores más relevantes en dicho proceso es el liquidador, y que sobre este recaen muchas responsabilidades, aquí te damos un panorama de su función.
“Tan solo entre 2016 y lo que va corrido de este año ya son 142 las empresas que se han liquidado”Tweet This
El pasado 12 de septiembre se conoció que en los últimos cinco años se han liquidado en todo el país 520 empresas, de las cuales 130 eran del sector de servicios, 110 del sector comercio, 114 del sector manufacturero, 37 de construcción, 35 de agropecuario, 11 minero e hidrocarburos, 26 del transporte y 57 sin información, lo que ha generado la pérdida de 14.873 puestos de trabajo.
Tan solo entre 2016 y lo que va corrido de este año ya son 142 las empresas que se han liquidado. Según la Supersociedades, el 49.5 %, es decir, 260 de estas empresas, llevaban más de 40 años de constituidas y el 22.2 %, que corresponde a 117 empresas, tenían entre 20 y 40 años. Por otro lado, del total de las empresas liquidadas el 38 % eran microempresas, el 30% pequeñas empresas, el 17% medianas empresas y el 13% grandes empresas.
Según la entidad, en los últimos 10 años se han iniciado 1.366 procesos de liquidación, de los cuales el 72 % (984) ya concluyeron. En el primer trimestre de este año 32 sociedades optaron por irse a liquidación, frente a las 22 que lo hicieron en igual período de 2016, lo que indica un incremento del 45,4 %.
Como lo publica El Tiempo, a esa cifra se suman también las compañías del país que se acogen cada día a procesos de reorganización. Del total de las empresas que iniciaron su liquidación en la última década, 163 son consideradas grandes; 254, medianas; 476, micro, y 455, pequeñas.
¿Cómo se liquida una sociedad?
Como primer paso se debe realizar una reunión de junta de socios o asamblea general de accionistas, según corresponda con el tipo de sociedad, quienes deberán aprobar la disolución. Como ya es conocido, se debe dejar constancia mediante un acta, la cual debe contener estos puntos, fuera de los requisitos generales: declaración de la causal de disolución, el número de votos que aprueban la decisión y la designación del liquidador.
El segundo paso es realizar el registro del acta de disolución en la Cámara de Comercio. Mientras el acta de disolución debe quedarse en el archivo de la sociedad, hay que entregar una copia en la Cámara de Comercio.
El paso a seguir es reportar a la oficina de cobranzas de la Dian las deudas fiscales de la sociedad. El liquidador deberá hacerlo dentro de los 10 días siguientes al registro de la disolución en la Cámara de Comercio.
Emitir avisos que informen que la sociedad se encuentra en trámite de liquidación, los cuales debe hacer el liquidador en un periódico de amplia circulación del domicilio social, en las oficinas de la sociedad y en los establecimientos de comercio de la sociedad.
El liquidador también debe elaborar un inventario del patrimonio social y el balance final de la sociedad.
Otra de las funciones del liquidador es realizar el pago de los pasivos externos. Así como el pago de las obligaciones fiscales y efectuar la declaración de renta final. Si la sociedad carece de pasivo externo, el liquidador tiene la potestad para convocar a asamblea y solicitar la aprobación del inventario como la cuenta final de liquidación.
El liquidador deberá distribuir remanentes entre los socios o accionistas.
El liquidador tendrá que elaborar el proyecto de liquidación, el cual debe tener: inventario, balance general, estado de pérdidas y ganancias, pasivos de la entidad, pago de pasivos, indicación y destinación del remanente, entre otros puntos.
Citar a una reunión de junta de socios o asamblea de accionistas para aprobar el proyecto de liquidación. El acta de esta reunión debe contener la indicación expresa acerca del monto del remanente de la liquidación, en caso de que no haya remanente, dicha situación debe indicarse expresamente, y la decisión de aprobar la cuenta final de liquidación y el número de votos con los que se aprueba. Ya que el acto sujeto a registro es la aprobación final de la liquidación, en el acta debe quedar constancia expresa de esto.
Se debe registrar el acta de la cuenta final de liquidación ante la Cámara de Comercio presentando copia del acta legible para garantizar su reproducción por medios electrónicos.
Solicitar a la Dian la cancelación del respectivo RUT. El liquidador adjuntará el certificado de cancelación de matrícula expedido por la Cámara de Comercio.