Experto de la Ocde aseguró que los esfuerzos hechos en materia laboral durante la última década se destruyeron en el primer semestre de este año. Stefano Scarpetta, director general de empleo, trabajo y asuntos sociales de la Ocde, afirmó que la primera ola del COVID-19 hizo que 31 millones de empleos se perdieran en el […]
Experto de la Ocde aseguró que los esfuerzos hechos en materia laboral durante la última década se destruyeron en el primer semestre de este año.
Stefano Scarpetta, director general de empleo, trabajo y asuntos sociales de la Ocde, afirmó que la primera ola del COVID-19 hizo que 31 millones de empleos se perdieran en el mundo. De presentarse un rebrote, el número se elevaría a 53 millones de puestos.
El experto señaló que todos los esfuerzos que se habían hecho en la última década en materia laboral se destruyeron en el primer trimestre de 2020.
Para el director de la Organización Internacional del Trabajo -OIT-, Guy Ryder, la pérdida de empleos ha golpeado en mayor medida a las poblaciones más vulnerables: jóvenes, mujeres, trabajadores informales e independientes. Por esto, dice que debe ser una prioridad de los gobiernos “saber cómo sustentar los costos económicos sustanciales que conllevan los apoyos a las empresas”.
La “nueva normalidad” también aceleró la forma en la que se trabaja. Roberto Suárez, secretario de la OIE, señaló que en América Latina hay seis millones de personas trabajando desde casa y 96 % de las empresas utilizaron el teletrabajo para hacerle frente a la pandemia. Por esto, el rendimiento de sus empleados, que ya no debe ser centrado en un horario diario, sino en función de sus resultados individuales y empresariales.