Asobancaria hizo la propuesta de que el impuesto 4×1.000 aplique únicamente a pagos en efectivo y se desmonte definitivamente en transacciones financieras.
Asobancaria hizo la propuesta de que el impuesto 4×1.000 aplique únicamente a pagos en efectivo y se desmonte definitivamente en transacciones financieras.
Lo que propone el gremio es que los ciudadanos que realicen la compra de productos o paguen algún servicio en efectivo, se les cobre un impuesto de $4 por cada $1.000, según lo dio a conocer RCN Radio.
Con la iniciativa se busca ampliar el número de personas que cuentan con al menos un producto financiero. Así mismo, otro de los objetivos es desmontar definitivamente el gravamen a los movimientos financieros –GMF–, que según la entidad desestimula el uso de los pagos electrónicos.
La propuesta traerá al país la masificación de los pagos o servicios electrónicos y además busca combatir la evasión de impuestos.
Fuente: La República.