Al final del período contable es posible encontrar cheques girados a proveedores y otros terceros, los cuales no han sido cobrados.
En este editorial le explicamos cómo contabilizarlos para presentarlos de forma adecuada en los estados financieros y en la conciliación bancaria.
Al final del período contable es posible encontrar cheques girados a proveedores y otros terceros, los cuales no han sido cobrados.
En este editorial le explicamos cómo contabilizarlos para presentarlos de forma adecuada en los estados financieros y en la conciliación bancaria.
Según nuestro conferencista, Juan Fernando Mejía, los cheques girados y no cobrados no deberían disminuir el valor contable de la cuenta “bancos” hasta que el portador del cheque no realice el cobro en el banco, pues hasta ese momento se sigue teniendo el control sobre el dinero.
En ese mismo sentido, la entidad tampoco debe cancelar el pasivo que resulte de la contrapartida del cheque emitido, puesto que aún no ha liquidado su obligación.
El tratamiento sugerido por Juan Fernando Mejía para los cheques girados y no cobrados es el siguiente:
Cuenta | Débito | Crédito |
Proveedores | XXX | |
Proveedores con cheques emitidos | XXX |
Cuenta | Débito | Crédito |
Proveedores con cheques emitidos | XXX | |
Bancos | XXX |
Teniendo en cuenta que cuando estos cheques se emiten al final del período los proveedores podrían cobrar el cheque al año siguiente, esta es una opción a considerar para que la cuenta del banco refleje el mismo saldo que el del extracto bancario.