Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
El impulso de muchos a comprar y gastar en Navidad conlleva el caer en publicidad engañosa, pagar precios más altos y creer que algunas promociones no tienen garantía. Si puede, mejor compre en enero a menores precios. Para la muestra un botón: el escándalo de Falabella.
Después de la polémica generada el fin de semana durante el madrugón de promociones que realizó Falabella Colombia, el presidente de la cadena internacional y el Superintendente de Industria y Comercio, se reunieron para hablar sobre el suceso que causó polémica entre los compradores.
Desde la Superintendencia se asegura que Falabella Colombia solicitó que se adelante una revisión sobre la política de precios y descuentos. Para este proceso puso a disposición del ente toda la información que sea necesaria.
Hay que recordar que varios usuarios compartieron a través de redes sociales imágenes de etiquetas rasgadas que, al parecer, fueron impuestas por la tienda para aumentar el precio de artículos sobre algunos precios más bajos ya existentes y presentarlos como supuestas promociones. Como era de esperarse, los usuarios calificaron el hecho como un engaño.
Es normal que por esta época, las personas corran en ‘desbandada’ a comprar. Y aunque lo mejor es comprar en noviembre, en enero también habrá promociones. Claro, si su pareja o los hijos son exigentes, es muy seguro que le exijan su ‘detalle’ para estrenar tanto el 24 como el 31 de diciembre. Si no lo hacen, los dos primeros meses del 2016 seguramente encontrará artículos rebajados.
Si bien todo sube en diciembre, los productos de primera necesidad no, pues sobre estos existe control, de tal manera que si por necesidad tiene que comprar en un supermercado productos de primera necesidad donde se observen incrementos inusuales o exagerados de dichos productos, guarde la factura y envíe la queja a la Superintendencia de Industria y Comercio, quien investigará e impondrá drásticas multas.
Si le ofrecen por una ‘módica suma’ una garantía extendida, lea muy bien y haga todas las preguntas necesarias, pues en muchos casos, no sirven para nada, tal como lo explicamos en el editorial Garantía Extendida o Suplementaria: un seguro que no sirve para mucho.
Algunas compras se pueden hacer con anticipación sin que el vendedor haga entrega del producto. Pero si la entrega del producto se hace efectiva en época decembrina, por ese solo hecho no puede existir alteración del precio; salvo que se haya advertido previamente y por escrito.
Por ejemplo, si usted compró en septiembre unos tiquetes aéreos para viajar el 24 de diciembre, pero días antes o en el mismo aeropuerto la aerolínea le informa que debe pagar un excedente por viajar en temporada alta o el mismo ejemplo pero con una reservación en un hotel, por supuesto que estando con maletas en el aeropuerto a todos les toca someterse a dicha arbitrariedad, pero lo que puede hacer es pedir la factura y cuando regrese del paseo, presente la queja ante la Superintendencia de Industria y Comercio, pues eso es publicidad engañosa y tiene multas altas.
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