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Camilo Enciso, secretario de Transparencia de la Presidencia de la República, afirma que la asfixia de los paraísos fiscales es el éxito de la lucha contra el lavado de activos, la corrupción y la financiación del terrorismo. Sin embargo, manifiesta que los paraísos fiscales no necesariamente son una materialización de actividades ilegales.
A finales de abril del 2016, el secretario de Transparencia de la Presidencia de la República, Camilo Enciso, intervino en el Seminario anticorrupción y transparencia para el desarrollo y la competitividad liderado por la ANDI.
En el marco del panel Transparencia y anticorrupción en compras y presupuestos públicos, Enciso anunció la puesta en marcha de un diálogo abierto con las firmas de abogados, con el fin de ahondar en la reflexión sobre su papel en la prevención, detección y denuncia de la corrupción, a propósito de la información revelada en los Panama Papers.
«Esto muestra la importancia de que Panamá avance hacia un proceso de apertura en sus actividades comerciales, sobre la inversión que llega a ese país, sobre los recursos que se administran desde allá, pero sobre todo que avance en procesos de cooperación de trabajo con autoridades tributarias y aduaneras de otros países para evitar problemas de lavado de activos, de contrabando y de corrupción”, señala el Secretario.
El Secretario de Transparencia también hizo énfasis en los réditos que se obtienen cuando la lucha del Gobierno contra “el enemigo público número uno del país” cuenta con la responsabilidad y el apoyo del sector privado. “La corrupción hay que combatirla desde todos los sectores y en todos los niveles sociales”, agregó.
Por otra parte, Enciso afirma que la asfixia de los paraísos fiscales es el éxito de la lucha contra el lavado de activos, la corrupción y la financiación del terrorismo.
“Nosotros estamos muy a la expectativa de la evolución de Panamá en lo que tiene que ver con la adopción de medidas que permitían fortalecer la cooperación internacional en materia tributaria y aduanera, para evitar que ese tipo de paraísos fiscales sean utilizados como lugares de destino que facilitan el ocultamiento de bienes de origen ilícito”, afirmó.
A su vez, manifiesta que los paraísos fiscales no necesariamente son una materialización de actividades ilegales: hay unas reglas de juego que le permiten a las empresas colombianas o a las personas naturales enviar sus recursos a dichos países.
“No hay que satanizar tampoco a las personas jurídicas o a las personas naturales colombianas que tienen recursos o que han abierto empresas en Panamá”, dice Enciso.
“Lo que estamos diciendo es que los paraísos fiscales por regla general son utilizados para el ocultamiento de bienes que son frutos de actividades ilegales y que eso eleva los riesgos de corrupción o de lavados de activos. De ahí la cooperación a nivel internacional tiene que acelerarse y Panamá tiene un compromiso muy importante en esa materia”, concluyó el Secretario de la Transparencia de la Presidencia.
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