Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Algunas entidades nunca conservan saldo de inventario al final del mes y tienen dudas sobre el reconocimiento de los costos de la operación bajo Estándares Internacionales, ante lo cual cabe preguntarse: ¿deben manejarse como parte del inventario o como gasto? Lo anterior puede ser el caso habitual de empresas productoras de carbón, por ejemplo, en las cuales el producto se vende inmediatamente este se extrae.
Ahora bien, el inconveniente mencionado no es propio del Estándar Internacional, sino de la técnica contable. Al respecto de los inventarios el Estándar Internacional para Pymes, en la Sección 13, indica cómo establecer su costo, da una definición e indica cuándo se debe reconocer; el párrafo 13.20 del Estándar Internacional para Pymes especifica que el costo del inventario se debe reconocer como gasto cuando el inventario en efecto haya sido vendido. En este caso la norma está aceptando que cuando el inventario se vende, se traslada su costo al estado de resultados.
Ahora bien, volviendo al tema meramente de técnica contable, una entidad de extracción incurre en muchos costos –personal, maquinaria, depreciaciones, permisos, licencias, amortizaciones, etc.– que se van acumulando en una cuenta denominada costos de extracción, igual a los costos de producción de una empresa manufacturera. Dichos valores serán incorporados posteriormente al inventario como un costo del inventario.
Si en la operación de la empresa es normal que inmediatamente se extrae el producto este sea vendido, entonces también en simultáneo se trasladan los costos de la cuenta de inventario al estado de resultados como costo de la mercancía vendida.
En estos casos la sugerencia es conservar el rastro de lo que se acumuló en la cuenta de costos de extracción, lo que pudo acumularse en la cuenta de inventarios y lo que finalmente se trasladó a la cuenta del estado de resultados en la cual al final va a quedar el costo.
No se recomienda hacer un tratamiento directo al estado de resultados; es mejor llevar todo el proceso (costo de extracción–inventario–costo de venta) para que quede mejor documentado el proceso de conformación de los costos.
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