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¿Cuál es el mayor reto que tienen las pymes frente a los Estándares Internacionales?


¿Cuál es el mayor reto que tienen las pymes frente a los Estándares Internacionales?
Actualizado: 1 agosto, 2018 (hace 6 años)

Expertos opinan que las pymes deben mejorar la calidad de su información financiera, y no concentrar la emisión de su información únicamente bajo los requerimientos fiscales. La realización del estado de situación financiera de apertura –ESFA– es un reto que tiene este tipo de empresas.

María Del Pilar Rodríguez, gerente NIIF/IFRS de BDO Colombia, afirma que una vez las pymes realizaron el estado de situación financiera de apertura –ESFA–, se encontró que no se cambiaron las bases de medición; situación que da pie a concluir que las pymes continúan ajustando su contabilidad para facilitar su reporte fiscal. Sin embargo, ¿cuál es la premisa? «Es que la contabilidad dejó de ser una generación de información contable, para pasar a una información financiera, la cual es analizada, en la realización de las revelaciones», dice Rodríguez.

De acuerdo con lo anterior, y desde su punto de vista, el reto es poder colocar la información financiera de la entidad en sintonía con los entornos económicos de la misma. «De esta forma, el objetivo de los marcos técnicos normativos se cumpliría y la administración tendría el insumo para la toma de decisiones que a la fecha no está utilizando», explica la gerente NIIF/IFRS de BDO Colombia.

“Otro reto que tienen por delante este tipo de compañías, piensa Suárez, es comprender la incidencia fiscal que tiene la aplicación de los Estándares Internacionales”

Por su parte, Luis Eduardo Suárez, docente e investigador de la Universidad Libre, asegura que el mayor reto que tienen las pymes frente a los Estándares Internacionales es realizar la implementación de estos a la mayor brevedad posible, efectuando el ESFA con corte al 1 de enero de 2015, las revelaciones al ESFA, el manual de políticas contables y operaciones bajo Normas Internacionales durante los años 2015, 2016, 2017 y lo transcurrido de 2018, teniendo en cuenta realizar las respectivas revelaciones en este proceso. «Hay que tener presente que el hecho de no haber efectuado este proceso no exonera a la pyme de hacerlo y, en su lugar, se está exponiendo a multas», advierte Suárez.

Otro reto que tienen por delante este tipo de compañías, piensa Suárez, es comprender la incidencia fiscal que tiene la aplicación de los Estándares Internacionales.

Carlos Arturo Rodríguez, consultor en Normas Internacionales de Información Financiera y socio de la firma IFAS SAS, recalca que las empresas deben ser conscientes de las bondades que tendrían al entrar en la onda de los Estándares Internacionales, pues ello «mejora la razonabilidad de los estados financieros, separa los impuestos de la contabilidad financiera, facilita el acceso a los mercados internacionales, mejora el modelo de operación por procesos de las entidades, y brinda condiciones equitativas a los profesionales contables colombianos para competir con los profesionales de otros países», dice.

Por su parte, para las pymes, opina Rodríguez, entrar en la onda supondría mejorar la calidad de la información financiera, ya que estas han pasado de ocuparse simplemente por pedir documentos a realizar un verdadero trabajo de análisis de la dinámica del negocio; supondría también el reconocimiento más real de los ingresos por sus respectivos contratos (caso de las empresas de construcción); la medición a costo amortizado, que ha permitido evaluar los costos financieros de las transacciones; el reconocimiento de ingresos con base en transferencia de riesgos y beneficios, que permite evaluar mejor los resultados de las empresas; y un impacto considerable al respecto de la calidad de la información, lo cual facilita la comunicación con los inversionistas actuales y potenciales.

Katherine Patiño, coordinadora de Normas Internacionales de BKF International SA, considera que los Estándares Internacionales se vienen aplicando de forma temerosa. «Las pymes en general y sus dirigentes aún se encuentran en un período de adaptación al cambio; el miedo radica en que las empresas se siguen preocupando más por el tema fiscal y no por crear o adoptar un modelo que aporte valor a su compañía», argumenta.

En cuanto a lo que deben hacer las pymes, Patiño sugiere que deben trabajar en varios aspectos, ya que actualmente sigue prevaleciendo lo fiscal sobre lo económico y financiero. «Pese a que ya se han cerrado brechas con la reforma tributaria, todavía prevalece el concepto de la factura, la deducibilidad, etc., asuntos que definitivamente deben ser trascendidos», dice.

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