Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

¿Cuál Perfil de Contador? ¿Disciplinar o Profesional? ¿Cuándo se es “Publico”? – Hernán Rodriguez


Autor: Hérnan A. Rodríguez

El desarrollo del contador profesional debe pasar por varios ciclos: una capacitación alrededor de lo disciplinar, un aprendizaje y experiencia alrededor de lo profesional y una certificación de sus competencias para servirle a la sociedad. Sociedad que está inserta en un sistema que se apoya en un capitalismo de estado.

En la disciplina contable se deben adquirir competencias para el desempeño en las prácticas generales del ciclo contable. Cualquier profesional que aspira a ser contador profesional debe formarse y adquirir experiencia para dar seguridad sobre el suministro de información para la toma de decisión y ser competente para evaluar y dar opinión sobre el uso eficiente de los recursos.

Los planes de estudio de las universidades de USA, en los que están incorporados desde hace años los US GAAP, ya están incorporando las IFRS dentro de sus currículos. Se da por sentado la enseñanza y el aprendizaje sobre la realidad de los negocios, que incluye la disciplina contable. Este perfil de contador público que incluye la disciplina contable y la formación profesional está fuertemente acreditado por un proceso de evaluación de competencias que es modelo mundial.

Los profesionales de la Contaduría Publica europea han pasado de una ambiente Multi GAAP (uno para cada país) al regulado por el conjunto único representado por las normas emitidas por la IASB, sin ser ajenos a la Convergencia IASB-FASB hacia un conjunto único de normas.

En Colombia, el contador trabaja a nivel de aplicación de planes de cuentas (PUCs) y de su relación directa con el diligenciamiento de formatos de estados financieros y su dimensión tributaria. El común del contador colombiano percibe la ejecución de tareas disciplinares como la esencia de lo que es objeto de fe pública. A este contador se le ha enseñado desde la academia a mirarse como “un profesional que va más allá de lo contable” y que es “un asesor de la gerencia”. En consecuencia los reguladores pretenden abarcar la reglamentación de lo disciplinar. También como consecuencia de esto los organismos de vigilancia no supervisan la correcta aplicación de normas para la práctica profesional y la emisión de opiniones profesionales sobre información financiera, sino que la discusión se centra en el sistema contable.

Contrastando el dominio multi-normativo para el ejercicio profesional en un mundo globalizado, con la falta de apertura normativa hacia la competitividad del contador colombiano, nos puede dar la impresión de un atraso. Atraso este que es aprovechado por los actores de la resistencia al cambio— rezago de un relevo generacional no concluido— para seguir reinando en ambiente desinformados e incrustar discursos pasionales y emocionales en la gran masa de contadores acorralados en la inviable visión nacionalista de la profesión.

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