Empleadores que incumplan deberes constitucionales, legales o reglamentarios con sus trabajadores y sindicatos pueden ser sancionados administrativamente a través de la oficina de trabajo, facultada para imponer sanciones de hasta 5.000 salarios mínimos.
Empleadores que incumplan deberes constitucionales, legales o reglamentarios con sus trabajadores y sindicatos pueden ser sancionados administrativamente a través de la oficina de trabajo, facultada para imponer sanciones de hasta 5.000 salarios mínimos.