Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
El contador general de la nación afirma que la demanda de capacitación en Normas Internacionales de Información Financiera frente a la oferta de capacitación que ofrece la Contaduría General de la Nación no calza. Es más el volumen de demanda que nuestra capacidad de oferta, dice Pedro Luis Bohórquez.
El contador general de la nación, Pedro Luis Bohórquez, afirma (refiriéndose a la adopción en Colombia de las Normas Internacionales de Información Financiera) que la contabilidad pública ayuda a construir país, por lo cual, «nosotros como reguladores, le hemos dado toda la posibilidad a todas las empresas del Estado para que acojan estas prácticas líderes».
«Cabe recordar que esta decisión la tomamos como una práctica de buen gobierno, la cual sometimos a validación por parte del IFRS. Es decir, el IASB validó este modelo de contabilidad para Colombia alineado en convergencia con las Normas Internacionales de Información Financiera», explica Bohórquez.
Desde su punto de vista, el tema de los Estándares Internacionales le ha dado visibilidad a Colombia a nivel internacional en lo que tiene que ver con la contabilidad pública, «por lo que debemos sentirnos honrados». Por tal motivo es que se debe seguir trabajando en este tema, capacitando a los contadores en la nueva contabilidad pública alineada a estas prácticas para las pequeñas y medianas empresas «que, en nuestro caso, son las empresas del Estado que no cotizan en bolsa», resalta Bohórquez.
El contador general de la nación está convencido que este proceso hacia los Estándares Internacionales posiciona a las empresas del Estado, especialmente las del grupo 1. «Hoy en día estas empresas han ganado visibilidad en el concierto internacional, posicionándose en el mundo de los negocios, ganando y compitiendo con los privados», resalta Bohórquez.
En cuanto a los impactos, Bohórquez dice que no se han visto afectados sus negocios, sino que el efecto se ha visto en el acomodamiento con los registros que tienen que hacer al pasar de prácticas contables locales a prácticas contables internacionales.
«Por ejemplo, Ecopetrol que en su informe del año 2015 dice que perdió 2,5 billones de pesos. Pero esto no quiere decir que perdió en los efectos de los flujos de caja, sino que lo que perdió fue por unos acomodamientos contables que se hicieron del orden de 500 mil millones de pesos en las amortizaciones del GoodWell de Ecopetrol», explica el contador general de la nación.
Efectivamente, una de esas amortizaciones tuvo que reversar contra el estado de resultados en los ingresos prospectados o que tenían proyectados en el balance sobre el diferencial cambiario que había de los barriles de petróleo, por el diferencial que bajó de 80 a 50 y 45 dólares, situación que todos los colombianos conocen. «Evidentemente eso impactó el balance. Pero fue desde el punto de vista de los registros contables para presentar la realidad económica y las revelaciones que se hicieron, más en flujos de caja no se afectó», concluye Bohórquez.
En cuanto al tema de capacitación, la Contaduría General de la Nación tiene que capacitar a sus regulados, «pero la demanda de capacitación frente a nuestra oferta de capacitación no calza; es más el volumen de demanda que nuestra capacidad de oferta».
En sintonía con lo anterior debe recordarse que la entidad viene capacitando a nivel nacional sobre nuevos marcos de contabilidad pública.
«Hace un año realizamos más de 26 ciudades de Colombia mediante talleres de 4 días y medio a los que asistieron entre 200 y 250 funcionarios públicos; contadores, revisores, gerentes financieros, jefes de control interno, a quienes estamos dando la capacitación básica para que entren en este proceso», concluye el contador general de la nación.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
