Hay un camino claro y definido, orientado por el Consejo Técnico de la Contaduría, en cabeza principalmente de su ex-presidente Luis Alonso Colmenares, a quien dicho sea de paso hay que hacerle un reconocimiento público por su esfuerzo por sacar adelante ese encargo que le dejó la Ley 1.314 de 2.009, pues en cabeza de él, principalmente, logró sacar adelante lo que hoy tenemos. Sin embargo, falta mucho para llegar a lo que algunos siempre hemos aspirado y tenido como meta: ver una verdadera profesión con visión financiera y gerencial, ser manos derechas en la toma de decisiones empresariales y dejar de ser la teneduría de libros, que es en realidad lo que ha sido esta actividad en su gran mayoría.
Aunque en Colombia por nuestra cultura hay que hacerlo por decreto y eso que falta el régimen sancionatorio, porque de no hacerlo pasará lo mismo que con el Decreto 2649/93; en mi concepto hay suficiente soporte filosófico y académico en las NIIF y necesariamente va a producir ese cambio de actitud de todos, frente a la internacionalización. Los que no se adapten o involucren con este cambio quedarán por fuera del mismo. Será un proceso de selección natural.
Tiene un efecto nefasto para nuestra actividad que en muchos casos ni siquiera alcanza la denominación de profesión. Tantos cambios, improvisaciones, ensayo y error, irrespeto hacia los contadores. Lo único que resuelve de raíz este problema crónico, que viene desde 1960 cuando se denominó profesión de la contaduría pública, cuando también nació en forma paralela la competencia desleal, envidias, odios entre colegas, es la unidad gremial nacional verdadera, sincera, que sea para todos, sea incluyente y no para unos pocos seudolíderes, que muchos con honrosas excepciones, se han aprovechado por años de la pasividad, conformismo, desidia, pesimismo, y apoyados en otras «cualidades» además de las que ya mencioné antes, de muchos contadores cizañosos, tumbadores, montadores, aprovechados y regalados.
Lo fundamental en este momento histórico para lograr una verdadera profesión es la unidad gremial nacional incluyente, buscando tarifas dignas, capacitación a precios razonables y otros muchos beneficios que pueden lograrse.
Y lo tengo muy claro, si no se hace durante este 2014, que es el de transición a estándares internacionales de información financiera, quedará esta actividad contable (no profesión), igual o peor que antes. En Europa, USA, Canadá, Australia, es la tercera profesión más respetada, reconocida y valorada. Este año 2014 es definitivo y clave para este logro.