Desde que entró en vigencia esta figura jurídica, cuatro millones de acciones de tutela han sido instauradas en los despachos judiciales de Colombia. Sin lugar a dudas, este mecanismo ágil, eficaz y accesible ha sido clave para el desarrollo de los derechos fundamentales.
El próximo 5 de julio, la Constitución Nacional cumplirá 20 años y uno de los aspectos que se destacan, y que gran utilidad y vigencia ha tenido en todo este tiempo, y que los colombianos le «han sacado el jugo» ha sido la Acción de Tutela.
En 1.991, la Asamblea Nacional Constituyente, sabía de la importancia de entregar una herramienta ágil y eficaz a los ciudadanos, para garantizar el cumplimiento de los derechos y garantías constitucionales, fue así como se implementó una herramienta judicial innovadora, accesible y contundente: la Acción de Tutela.
La tutela tiene como objetivo llenar los vacíos de protección, pero nunca como un medio que suplante las herramientas ordinarias del derecho, las cuales son las llamadas a aplicarse preferentemente.
«La tutela es la vedette de la Constitución. No en vano se han instaurado más de tres millones de tutelas. También resalto que aunque esta Constitución es presidencialista, no lo es tanto como la de 1886 que era hiperpresidencialista. Súmele la libertad religiosa», dice el presidente de la Corte Constitucional, el magistrado Juan Carlos Henao en El País.
Para el exministro del Interior y ex Vicepresidente Humberto de la Calle, la Tutela ha respondido a la necesidad de justicia, tantas veces postergada. «La tutela es el tren de aterrizaje de la Constitución, la que la convirtió en realidad cuando era apenas libro de anaquel. Y como vórtice y vértice, la Corte Constitucional ha hecho una tarea monumental en el campo de la incorporación de los derechos a la vida real de los ciudadanos», le dijo a El Tiempo.
El ex presidente César Gaviria, al respecto opina que en ocasiones el tema de la Tutela se presta para que existan abusos y errores, pero «por primera vez en la historia de Colombia hubo pronta y cumplida justicia. Saber que la Tutela se uso para defender los derechos ciudadanos ha sido un avance grande en la sociedad colombiana».
Gaviria sugirió en El Tiempo, que no hay que limitar la tutela, sino «poner a la justicia a funcionar de manera más eficaz. Creo que esa sería la esencia de lo que debería ser una reforma de la justicia. Que las otras ramas de la justicia funcionen con eficacia para que no se abuse de la tutela. Hay que llegar a una justicia sin tantos retrasos y que opere rápidamente».
En una sola palabra se podría decir: congestión. Y es que los ciudadanos no encuentran otra forma de reclamar garantía de sus derechos que con la acción de tutela. La comisión de expertos convocada por el Gobierno para la reforma a la justicia señala que el “uso desbordado” de la tutela “ha agravado el incumplimiento de los términos procesales, la mora y la congestión judicial en el trámite de los procesos ordinarios”.
Otro de los reparos que ha tenido la acción de tutela es la inseguridad jurídica que ha generado la procedencia contra sentencias judiciales de las altas cortes.