Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
100 billones de pesos es la meta que tiene en mente la DIAN a la hora de recaudar impuestos para el próximo año.
Según Juan Ricardo Ortega, director de la DIAN, “algunas de las medidas aplicadas, de la reforma tributaria aprobada en diciembre del año pasado, cerraron brechas a la evasión y quitaron beneficios que ya cumplieron su función”, dijo en Radio Nacional de Colombia.
Agregó que “de enero a noviembre, los ingresos del recaudo bruto proveniente de los impuestos administrados por la DIAN, ascendieron a 81,2 billones de pesos, según la subdirección de recaudación de esta entidad”.
La lucha contra la corrupción y la evasión, y el buen crecimiento de la economía, le permitirán a Colombia aumentar el recaudo de impuestos a 100 billones de pesos el próximo año, lo que hace que el recaudo tributario se situará por encima de las metas establecidas para el 2011 y el 2012, gracias al dinamismo de la economía y el mayor control sobre la evasión y el contrabando.
«La meta no es esa, pero gerencialmente mi meta es 100 billones de pesos, con lo que estaríamos creciendo casi 50% en dos años», dice Ortega en entrevista con Reuters.
«Hay una dosis de crecimiento económico, eso es indiscutible y porque hemos empezado a detectar todas las trampas de los sistemas», dijo refiriéndose a la evasión de impuestos, que de acuerdo con cálculos del organismo ronda los 6,5 billones de pesos anuales.
Para Ricardo Ávila, director de Portafolio, las cifras positivas que arroja este final de año se deben en parte porque la reforma tributaria del 2010 permitió el cierre de varios boquetes. Entre otros, las deducciones por inversión en compra de activos fijos fueron puestas en cintura, al igual que el gravamen a los movimientos financieros.
A la DIAN, dejando a un lado los escándalos de corrupción, hay que darle crédito por su labor de fiscalización, la cual ha sido rentable. La eliminación de carteles que se habían asentado al interior de la administración o el nombramiento de personas honestas en las aduanas, también han tenido efectos positivos.
La DIAN tiene en la mira diversas prácticas que van desde el uso de mecanismos encaminados a disminuir la base gravable o la simple y llana evasión del impuesto al valor agregado.
Ortega admite que actualmente se están realizando investigaciones a importantes empresas del sector petrolero y minero al respecto.
Como argumenta Ortega en El Colombiano los contribuyentes hoy en Colombia son muy pocos. Declarantes hay muy pocos, unos 1.3 millones y contribuyentes… son una vergüenza. Las personas que no son asalariadas, que son personas naturales y reciben ingresos por contrato tienen retención y al ser sujeto de retención y no poder recuperarla, porque no declara, él contribuye, pero ni siquiera sabe que lo hace.
Parte de lo que se quiere hacer, es que todo el que contribuye entre a declarar y lo haga fácilmente. De 45 millones de habitantes, sólo 1,3 millones declara, entonces uno podría hablar de cifras que pueden aumentar dos o tres veces, sin que esto vaya a implicar que les cueste un peso.
«La norma tributaria en Colombia no es buena, está mal escrita, tiene defectos grandes, no está en algunas dimensiones bien concebida. Hay mucha gente que logra disminuir sus obligaciones tributarias con cosas que le pueden mostrar a usted como legales, muy cuestionables pero legales», afirmó Ortega.
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