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Lucha contra la corrupción de Transparencia por Colombia cumplió 20 años


Lucha contra la corrupción de Transparencia por Colombia cumplió 20 años
Actualizado: 29 noviembre, 2018 (hace 5 años)

Existen vacíos del Gobierno en el compromiso con la lucha contra la corrupción: falta mayor liderazgo en el trámite de las leyes presentadas al Congreso y el Plan Nacional de Desarrollo debe profundizar la estrategia para la lucha contra la corrupción como parte de sus ejes de legalidad y equidad.

El 21 de noviembre de 2018 Transparencia por Colombia cumplió 20 años de labores. Una entidad que en todo este tiempo ha contribuido decididamente al fortalecimiento de la institucionalidad del sistema democrático nacional, así como ha desarrollado y probado un amplio número de iniciativas, metodologías y herramientas que han significado importantes avances para superar riesgos de corrupción.

Rosa Inés Ospina, presidenta de la junta directiva del organismo, resalta algunos aportes que desde la entidad se han realizado. El trabajo desde Transparencia por Colombia, a nivel nacional como regional, ha logrado presionar a los distintos gobiernos para que mantengan el tema de la lucha contra la corrupción en sus agendas tanto de campaña como de gobierno.

«El espacio para hacer las denuncias y dar el debate es cada vez más amplio e incuestionable. Las distintas fuerzas vivas de la sociedad están hoy mucho más inmersas en la temática, más activas en los debates y más comprometidas con las acciones a tomar», dice Ospina.

La directiva de Transparencia por Colombia también destaca el hecho de que más de once millones y medio de personas hayan votado por convicción la consulta anticorrupción –independientemente del contenido de la misma–, pues es un indicador de la fuerza que esta problemática ha cobrado en la agenda pública, lo que se debe al trabajo mancomunado de distintas fuerzas y actores, no solo de la entidad en cuestión.

Uno de los avances más significativos es la ley de transparencia y acceso a la información. «Gracias a esta ley, hoy tenemos condiciones favorables para luchar contra la corrupción. Poco a poco y con trabajo en lo regional y lo local, grupos de ciudadanos entienden y han implementado conceptos y metodologías que les permitan hacer realidad el control a la gestión pública y privada», expresa Ospina.

“desde Transparencia por Colombia se han preocupado por entender la corrupción, sus formas, dinámicas y efectos”

Otro aporte es que desde Transparencia por Colombia se han preocupado por entender la corrupción, sus formas, dinámicas y efectos, y de la mano de importantes aliados se ha avanzado hacia planteamientos como el de la “captura del Estado” por parte de redes criminales así como de importantes grupos de poder que operan desde la legalidad. Finalmente, se está avanzando en ubicar a las personas en el centro de esta lucha.

Retos que Transparencia por Colombia tiene por delante

Para Ospina es claro que la corrupción sigue amenazando no solo los recursos sino el respeto por nuestros derechos fundamentales, empezando por el derecho a la vida misma; a la oportunidad de cerrar las dramáticas brechas de inequidad social, económica y política de nuestro país; hasta la legitimidad de nuestras instituciones, tanto públicas como privadas. «La ciudadanía se siente agraviada, irrespetada, y ante los escándalos que involucran a figuras públicas, no le resulta fácil encontrar líderes y modelos para seguir», expresa.

La presidenta de la junta directiva del organismo propone continuar construyendo una agenda ciudadana de lucha contra la corrupción que incluya la construcción de un cambio cultural a partir del involucramiento de la ciudadanía en el cuidado de lo público. «Lo anterior implica el reconocimiento por parte de la inmensa mayoría, de sus derechos, y de los mecanismos y oportunidades para exigirlos», dice Ospina.

Se debe insistir en la necesidad de descifrar con mayor claridad el comportamiento de unas redes de corrupción cada vez más sofisticadas, así como de lograr un mayor y más compenetrado diálogo con el Estado y con los actores políticos. «Observamos algunos vacíos del Gobierno en el compromiso con la lucha frontal contra la corrupción: hace falta un mayor liderazgo en el trámite de las leyes presentadas al Congreso y necesitamos que El Plan Nacional de Desarrollo profundice la estrategia estructural del Gobierno para la lucha contra la corrupción como parte de sus ejes de legalidad y equidad», manifestó Ospina.

Finalmente se debe fortalecer el diálogo con el sector privado, que hoy entiende mejor la responsabilidad que debe asumir en la superación de prácticas corruptas. Un elemento especialmente importante para este fin son los nuevos regímenes de responsabilidad penal de las personas jurídicas, que imponen mayores exigencias en la manera de hacer negocios.

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