Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Antes de terminar su gestión, el exministro de hacienda, Mauricio Cárdenas, firmó un contrato de préstamo con el BID por 600 millones de dólares para financiar el Presupuesto General de la Nación.
“Estoy muy complacido de poder cerrar mi gestión como ministro de hacienda y crédito público dejando la tranquilidad al Gobierno entrante de que la meta de financiamiento externo prevista para este año queda totalmente asegurada, con contratos firmados listos para desembolsar”, manifestó Cárdenas.
El plan financiero para 2018 contempla recursos del orden de los 2.918 millones de dólares, provenientes de financiamiento externo con bancos de desarrollo bilaterales y multilaterales para el financiamiento del presupuesto. A la fecha, se han desembolsado recursos por 1.507 millones de dólares, equivalentes al 52 %; el 48 % restante está programado para desembolsarse en lo que resta del año.
Los préstamos son contratados con condiciones financieras favorables y competitivas que siempre están por debajo de la curva de rendimientos en dólares de la nación. “Es importante destacar que el financiamiento con estos bancos, cuyas tasas oscilan entre el 1% y el 4 % anual, con plazos de hasta 25 años, representa para la nación un costo inferior al que puede obtener en los mercados financieros internacionales con emisiones de bonos. Por esta razón, ha sido una prioridad para nosotros maximizar los montos a contratar con estos bancos”, destacó Cárdenas.
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