Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Muchos jóvenes creen que al salir van a recibir el triple de lo que realmente obtendrán


Aicpa encontró que la contratación de los recién graduados ha disminuido considerablemente, que la de auditores aumentó y la de impuestos disminuyó. Ahora bien, “non-accounting hires as a percentage of all new graduate hires are up 11 percentage points to 31%”.

Según los últimos datos del Observatorio Laboral para la Educación Superior, el 85 % de los egresados del pregrado en 2016 obtuvieron empleo y cotizaron sobre un IBC de $1.505.455. Esto significa que un 15 % quedó cesante.

Es innegable que las empresas prefieren contratar a personas con mejores competencias. Cualquier atributo puede implicar una diferencia: más profundidad en ciertas áreas del saber, más desarrollo de habilidades como el pensamiento complejo, posiciones éticas más firmes, manejo de otras lenguas, prácticas en el exterior, habilidad en el manejo de herramientas de TI, etc.

Como la contaduría desde siempre ha sido multidisciplinaria, hay empleos a los que pueden aplicar distintas profesiones; por ejemplo, un contador y un financiero pueden aspirar al manejo de la tesorería, y un contador y un ingeniero industrial pueden concursar para trabajar en el área de presupuestos. No tiene nada de raro que se realice la llamada contratación de no contadores.

¿Qué motiva a un empleador a inclinarse por una u otra profesión? Todo depende de cada empresa, pues su cultura organizacional será un factor que influya en estas decisiones. Si los contadores se quedan atrás en las habilidades y las actitudes, es probable que cedan terreno frente a otros profesionales.

Sabemos que muchos jóvenes tienen mala información sobre el mercado laboral. Algunos creen que al salir van a recibir el triple de lo que realmente obtendrán. Otros piensan que van a tener muchas personas a cargo para darles órdenes. No faltan los que ya tienen diseñado un paquete de beneficios, que incluye un automóvil en el corto plazo. El golpe es duro cuando se despeja la bruma y ven con claridad.

En todo caso, hay que enseñarles a no dedicarse a lo técnico o tecnológico, a lo que lamentablemente los inclinan sus profesores. Hay muchos de estos que hablan desde la filosofía, la política, la sociología, etc., bregando por presentar un escenario de mayor profundidad, pero nada aportan sobre cómo atender necesidades de los clientes desde las fortalezas específicas de un contable.

TAMBIÉN LEE:   [Conferencia] El contador público más allá de la tecnología

Algunos privilegiados obtienen trabajo a partir de sus prácticas estudiantiles, que les permiten conocer entidades concretas y demostrar su carácter e idoneidad. Otros participan en concursos, como los que suelen hacer las firmas de contadores, quienes tratan de seleccionar los más preparados para las actividades que ellas realizan. No faltan los que abren despachos en donde no hay profesionales, y poco a poco se van adueñando de la plaza. La academia contable debe orientar mejor a los estudiantes sobre la realidad del mercado de los servicios profesionales.

Hernando Bermúdez Gómez
Tomado de Contrapartida – De Computationis Jure Opiniones
Número 5386, octubre 19 de 2020.

Hernando Bermúdez Gómez
Las publicaciones “Contrapartida” son escritas por miembros de la comunidad académica del Departamento de Ciencias Contables de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Pontificia Universidad Javeriana.
Descubre más recursos registrándote o logueándote. Iniciar sesión Registro gratuito