La capacidad de endeudamiento se define como el rango de dinero disponible que tiene un deudor para asumir una cuota mensual de un crédito. En este editorial entregamos las pautas para calcular su nivel de endeudamiento y le explicamos cuando es o no conveniente adquirir un crédito.
La capacidad de endeudamiento se define como el rango de dinero disponible que tiene un deudor para asumir una cuota mensual de un crédito. En este editorial entregamos las pautas para calcular su nivel de endeudamiento y le explicamos cuando es o no conveniente adquirir un crédito.
La capacidad de endeudamiento se define como el rango de dinero disponible que tiene un deudor para asumir una cuota mensual de un crédito. Para determinar esta capacidad de endeudamiento se requiere evaluar qué tan comprometidos están los ingresos del deudor frente a sus deudas actuales o sus egresos.
Un crédito siempre es una gran alternativa para cuando no se cuenta con recursos de forma inmediata y se desea celebrar un contrato, obtener alguna oportunidad que no se puede dejar pasar o incluso bienes que por su monto no se pueden obtener inmediatamente, como es el caso de la adquisición de vehículo o vivienda. Sea cual sea el caso es conveniente adquirir un crédito cuando se obtiene un beneficio como un descuento, con el fin de que en la relación costo-beneficio es más conveniente adquirir el bien a crédito que de contado o cuando el bien o servicio adquirido representa beneficios económicos a futuro.
De acuerdo con la información que suministra la página web de Asobancaria y los portales de diferentes entidades financieras, para realizar el cálculo del nivel de endeudamiento se requiere conocer los ingresos totales que se reciben mensualmente, en caso de que los ingresos a recibir sean variables, ya sea por comisiones o porque se desempeña una labor como independiente, se debe entonces incluir en este rubro el ingreso que es más probable que se reciba para no sobreestimar este rubro y no entrar en dificultades en caso de que no se haga efectivo el ingreso esperado.
Otro rubro a tener en cuenta son los pasivos, costos y gastos fijos mensuales, en que se deben incluir: las cuotas de las deudas adquiridas con entidades financieras o terceros, los gastos de vivienda, alimentación, salud, transporte, educación, recreación, entre otros, que finalmente sean obligaciones fijas mensualmente.
A continuación, mencionamos los pasos que se deben seguir para identificar en cuál grado de riesgo de endeudamiento se encuentra un deudor, con miras de identificar qué tan conveniente puede ser adquirir un nuevo crédito. Sin embargo, tenga presente que esta evaluación se realiza con base en cálculos aproximados de lo que consideran las entidades financieras, ya que para efectos contables los indicadores de endeudamiento se evalúan con fórmulas distintas, para conocer más al respecto lo invitamos a leer nuestro editorial Indicadores de endeudamiento como control de los pasivos.
El deudor antes de adquirir un crédito debe tener clara su capacidad de pago y de ahorro mensual, considerar un plazo acorde a su capacidad de pago para no incurrir en moras, trazar un objetivo claro al cual se van a destinar los recursos y finalmente, debe comparar productos, condiciones y tarifas en cada una de las entidades financieras a su disposición con el fin de adquirir el producto más conveniente.
Ahora bien, cuando el usuario financiero ya adquiere el crédito debe estar atento a cumplir con las cuotas de forma puntual, respetar el presupuesto que programó para los gastos mensuales, llevar un folder o una carpeta ya sea virtual o física con el consecutivo de sus extractos y respectivos pagos, asimismo estar atento a las líneas de atención de la entidad para cualquier reclamación o duda sobre el servicio.
Hay que tener presente que, en caso de incurrir en mora con un crédito, si la mora es inferior a dos años, el reporte de centrales de riesgo no podrá exceder el doble de la mora. Por ejemplo, si ésta es de 10 meses el reporte permanecerá hasta el doble de tiempo contado a partir de la fecha de pago de la obligación, es decir 20 meses. Si por el contrario la mora supera los 2 años, el reporte durará máximo 4 años a partir de la fecha de pago de la obligación, por ejemplo, si la mora es de 26 meses el reporte en centrales permanecerá solo hasta los 48 meses, es decir 4 años.