En dialogo con Juan David Tous Ramírez, Gerente de Comunicaciones en ManpowerGroup Colombia e investigador de temas socioeconómicos del mercado laboral, afirma que el mercado laboral nacional presenta variables que indican que al tiempo que se crean unos empleos, se destruyen otros, se fusionan, cambian de sector o hay varios desempeñados por una sola persona.
En dialogo con Juan David Tous Ramírez, Gerente de Comunicaciones en ManpowerGroup Colombia e investigador de temas socioeconómicos del mercado laboral, afirma que el mercado laboral nacional presenta variables que indican que al tiempo que se crean unos empleos, se destruyen otros, se fusionan, cambian de sector o hay varios que son desempeñados por una sola persona.
Este comunicador social-periodista, con especialización en Estética y Semiótica de las culturas de la Universidad Nacional y estudios de interculturalidad, investigación y teorías de la comunicación de la Universidad de Guadalajara, desde hace 7 años está vinculado con ManpowerGroup, donde realiza investigaciones sobre temas socioeconómicos del mercado laboral.
Todavía es temprano para saberlo. Desde el punto de vista de Manpower, nuestro estudio sobre expectativas de empleo en Colombia para el primer trimestre arroja que los empleadores están prudentes en sus intenciones para contratar, pero se necesita que la reforma lleve vigente un buen tiempo para ver si las intenciones se tradujeron en menos empleos o si, por el contrario, se generaron de todas maneras nuevos trabajos.
Es importante reconocer los esfuerzos del gobierno para buscar ampliar las oportunidades de trabajo y de formalizarlo. Sin embargo es también importante separar los trabajos informales de los formales siempre. No se debe “sacar pecho” con las cifras de disminución de desempleo si estas incluyen el rebusque. Hay que sacar pecho si se logra un desarrollo tal del mercado laboral como para que el rebusque no sea tan común, o incluso si deja de ser la única opción laboral para tantos colombianos.
En este punto es importante recordar que el mercado laboral tiene múltiples aristas. Por ejemplo, mientras en un lado se habla de temores por tener cada vez menos jóvenes con los talentos necesarios en el mercado laboral, por otro se habla de inconvenientes por sobrepoblación, o mientras se habla de más empleos por una parte, por otra las cifras se interpretan desde el punto de vista de la disminución de personas buscando trabajo porque se desaniman al no encontrarlo.
Por el momento, las cifras oficiales en Colombia son las del DANE, pero con el tiempo, y si se logra reunir la información requerida por el Servicio Público de Empleo, una minería de datos a las estadísticas de este servicio posiblemente podrán dar datos más precisos.
La contratación suele hacerse con base en el personal que las empresas necesiten para sus proyectos, no tanto como respuesta a un estímulo tributario. Pero indudablemente los beneficios representan una facilidad para los empleadores. Hay en este tema algo interesante, y es cómo el concepto del trabajo va más allá de ser la labor realizada para producir los productos y servicios. No es solamente una respuesta a la demanda de talento, es una necesidad social. Por eso se buscan maneras de estimular la creación de empleo que vayan más allá de las que el mercado por sí mismo va requiriendo.
El gobierno ha hablado de creación de empleos con cifras específicas, pero recordemos que al tiempo que se crean unos empleos, se destruyen otros, se fusionan, cambian de sector, hay varios empleos desempeñados por una sola persona, etc, así que las cifras lo que pueden mostrar son tendencias, no empleos exactos. Con la información que se pretende conseguir por medio del Servicio Público de Empleo, registrando cada empleo formal, se podrán en el futuro conocer datos más exactos, como decíamos antes.