Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Con la finalidad de generar un ambiente apropiado con los inversionistas, PwC recomienda a las empresas que deben adoptar los Estándares Internacionales (que empiezan a regir este año) una comunicación temprana y transparente junto con revelaciones mejoradas.
Son varias Normas Internacionales de Información Financiera que entran en vigor entre 2018 y 2021, y las empresas, sin duda, ya estarán considerando qué implicaciones contables tienen estas en su negocio. También evaluarán si necesitan implementar nuevos sistemas para captar la información requerida y si los contratos, y quizás incluso los comportamientos del personal, necesitan cambiar.
Por otra parte, los inversionistas estarán interesados en el modo en que las empresas están abordando estas nuevas normas, especialmente si se espera que tengan un impacto material en los estados financieros de la entidad. Los inversionistas analizarán las revelaciones de los estados financieros de las empresas tanto en el período previo a la implementación como después de que se adopte la norma.
Por todo lo anterior, surge la pregunta: ¿qué puede hacer una empresa para hacer pertinente la comunicación de las nuevas normas? Desde PwC plantean dos soluciones:
Los inversionistas quieren que las empresas se comuniquen lo antes posible para evitar sorpresas y que estas sean transparentes sobre los cambios. Las empresas que se comunican sobre el impacto de una norma antes de la adopción son vistas positivamente por los inversionistas y se considera que aquellas que así actúen están un paso adelante.
Si el efecto de una norma sobre las cuentas de la entidad es material es importante que este mensaje llegue a los inversionistas lo antes posible. A la bolsa de valores no le gusta la incertidumbre y tratará de llenar cualquier laguna en la información. Por lo tanto, las empresas deben asegurarse de que son las que envían los mensajes sobre el efecto en ellas, y no dejar que el mercado suponga.
Además de la información en los estados financieros y anuncios provisionales, las presentaciones para los analistas también se consideran útiles.
Los inversionistas también quieren que las empresas sean claras sobre las diferencias entre la práctica actual y la nueva norma, y que proporcionen conciliaciones de las diferencias o información suficiente para permitirles realizar sus propias conciliaciones.
Marie Claire Tabone, gerente de Investor Engagement, dice que también es importante distinguir entre lo que ha cambiado como resultado de la nueva norma y lo que se debe a la economía subyacente de la empresa. «Las noticias sobre el mal desempeño no deben ser enterradas dentro de las revelaciones y explicaciones o achacarse a la nueva norma», afirma.
Las nuevas normas contables también pueden considerarse como una oportunidad para mejorar las revelaciones de una empresa. Una empresa puede reemplazar las viejas revelaciones de estándares por medio de notas significativas, incluyendo detalles útiles para permitir a los inversionistas entender las cifras. «Los inversionistas no aprecian la excusa de la “sensibilidad comercial” para las revelaciones limitadas, y esto no debe constituir un obstáculo para aclarar, ya que creen que los competidores tienden a ser ya conscientes de dicha información», explica Tabone.
Para mejorar aún más su comprensión, los inversionistas deseaban tener idealmente al menos tres años de comparativos bajo la nueva norma en el primer año de adopción, situación que no ocurrió, puesto que va más allá de los requerimientos de las normas; sin embargo, esto hubiese ayudado a los inversionistas a comprender las implicaciones de la nueva norma y a evaluar el desempeño de la empresa.
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