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Para Javier Echeverri, country manager de ManpowerGroup Colombia, la generación de empleo formal en Colombia durante el segundo trimestre de 2018 dependería de factores como las elecciones presidenciales, la migración de venezolanos y la lenta asimilación de la reforma tributaria, entre otros.
La más reciente encuesta de expectativas de empleo, realizada por ManpowerGroup para el segundo trimestre de 2018, contó con la participación de 59.000 empleadores en 44 países, 750 de ellos en Colombia; a estos se les preguntó: “¿Cómo prevé usted que cambie el empleo en su lugar de trabajo en los tres meses que terminan en junio de 2018 en comparación con el trimestre actual?”.
Javier Echeverri, country manager de ManpowerGroup Colombia, afirma que los empleadores colombianos reportan planes modestos de contratación para el segundo trimestre de 2018. «Mientras el 15% de los empleadores espera incrementar su personal, el 7% anticipa un decrecimiento y el 76% no pronostica cambio alguno, lo que resulta en una expectativa neta de empleo de +8%», dice Echeverri.
Echeverri indica que este número se convierte en la intención de contratación más débil reportada en los últimos 8 años, decayendo en 2 y 6 puntos porcentuales trimestre a trimestre y año a año, respectivamente, y llevando al mercado laboral colombiano –entre 44 países– a pasar del lugar 23 entre enero y marzo al 34 para el trimestre abril, mayo y junio.
“Este segundo trimestre de 2018 evidencia la lucha de las empresas contra la incertidumbre, en medio de la proximidad de las elecciones presidenciales, pues hay grandes inquietudes alrededor de los posibles cambios políticos. Además tenemos en el mercado laboral el efecto de la migración de venezolanos, el efecto psicológico del enfriamiento económico de 2017, la espera a que los intereses reducidos por el Emisor se conviertan en realidad para empresas y ciudadanos y la lenta asimilación de la pasada reforma tributaria, entre otros elementos que bajan la confianza entre los generadores de empleo”, comenta Echeverri.
Sin embargo, desde su punto de vista hay signos esperanzadores en los desarrollos de la construcción y el crecimiento del turismo, además algunas posibilidades de aumentos en el consumo.
Una de las conclusiones de la encuesta es que a lo largo y ancho del país se evidencian los temores que trae al mercado laboral la actitud de “esperar a ver” entre los empleadores, aguardando a la definición del panorama político para saber si este produce la confianza necesaria para hacer proyectos, invertir y, consecuentemente, generar nuevas oportunidades de trabajo. Según Echeverri, el panorama político jugará un papel importante para la generación de empleo formal en Colombia durante el segundo trimestre de 2018.
«Bogotá disminuye un poco su expectativa neta de empleo, tanto en la comparación trimestral como anual. Medellín mejora un 10% respecto al inicio del año, al igual que Cali, con esperanzas en ambas en movimientos del comercio, servicios y agro. En Barranquilla y Cartagena la inquietud de los empleadores se expresa en expectativas netas de empleo inferiores a cero, luego de períodos bastante dinámicos hace un año, mientras que el Eje Cafetero se mantiene prudente, pero mejora un poco respecto al inicio de año», describe Echeverri.
Los empleadores esperan que en 7 de los 9 sectores donde se mueve el empleo aumente el nivel de contrataciones de personal el próximo trimestre. El mercado laboral más fuerte en cuanto a expectativa neta de empleo es el sector de la construcción, con +15%; le siguen administración pública y educación (13%) y el sector servicios (12%). Se esperan oportunidades de contratación en finanzas, seguros y bienes raíces, donde la expectativa neta de empleo es de +9% y en el sector minero (+8%). Sin embargo, los empleadores encuestados en dos de los sectores pronostican disminución de personal, con expectativas de empleo de -3% y -2% en manufacturas y en comercio minorista y mayorista.
«Trimestre a trimestre, la expectativa disminuye en 5 de los 9 sectores. El declive más notable es de 11 puntos porcentuales en el sector manufacturero. En agricultura y pesca los empleadores reportan una disminución de 5 puntos y también hay disminuciones de 2 puntos en los sectores de construcción y minería. Mientras tanto, los aumentos más notables en la confianza para generar nuevos empleos ocurren en 3 sectores, con 6 puntos porcentuales en administración pública y educación, y en 3 puntos en finanzas, seguros y bienes raíces», explica Echeverri.
En 7 de los 9 sectores se reporta mayor debilidad en las contrataciones en comparación con el año pasado. Se observa una considerable disminución de 18 puntos porcentuales para el sector manufacturero, mientras que finanzas, seguros y bienes raíces reporta un declive de 10%.
«Por otro lado, las expectativas son 9 puntos porcentuales más débiles en agricultura y pesca y en el sector del comercio minorista y mayorista, mientras que en transportes y servicios públicos se espera un aumento de 7 puntos porcentuales, y se prevé un aumento de 11% en administración pública y educación», concluye Echeverri.
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