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Samar Maziad, analista senior de Moody’s, afirma que desde el punto de vista de la calificadora, hablar de cero impuestos por parte de los candidatos a la presidencia, es una utopía. También plantea que de disminuirse los impuestos se requeriría de otra alternativa para mejorar el déficit.
Samar Maziad, analista senior de la calificadora Moody’s, habló con LA FM sobre qué tan posible, o no, es recortar los impuestos en el país, incluso abolir el IVA, como han planteado algunos candidatos a la presidencia de la república. “Nosotros nos enfocamos en el resultado final fiscal; si hay posibilidad de recortar gastos o aumentar impuestos. Si se bajan los impuestos entonces se necesita otra forma de mejorar el déficit global. Ese es el punto”, manifestó Maziad, quien agregó que se necesitan obtener recursos.
Hablar de cero impuestos es una utopía a la luz de la calificadora de riesgo. “Si hay baja de impuestos, pero también baja de gastos, por ejemplo una reforma tributaria, dependería del paquete integral. Hay poca posibilidad de recortar gastos”, afirmó Maziad, quien también aseguró que no se puede determinar un panorama de Colombia dependiendo del candidato que gane la presidencia, explicó, sino de las medidas económicas que adopte.
Hay que recordar que el 22 de febrero de este año, Moody’s anunció que mantiene la calificación crediticia de Colombia en «Baa2», un escalón por encima del grado de inversión «Baa3», aunque revisó la perspectiva a futuro, de estable a negativa. Según el informe, la firma mantuvo la calificación resaltando que diversos factores como el crecimiento, el tamaño de la economía, la institucionalidad y la baja vulnerabilidad externa se mantienen en línea con otros países con calificación «Baa2».
Moody’s cambió la perspectiva de estable a negativa, aduciendo la incertidumbre generada por la polarización política en medio del proceso electoral que se avecina. La calificadora anunció que dicha polarización política puede reducir la capacidad del próximo Gobierno para la implementación de medidas fiscales adicionales y preservar la fortaleza fiscal del país.
«El Ministerio de Hacienda presenta un método de ajuste ambicioso, dada la desaceleración del crecimiento económico y el aumento en los ingresos luego de la reciente reforma tributaria», dijo Maziad. «Si bien esperamos que la reforma tributaria aumente los ingresos en el corto plazo, es probable que no sea suficiente para alcanzar los objetivos fiscales establecidos para el mediano plazo», agregó.
Al hablar sobre el principal riesgo para la economía nacional en el corto plazo, desde su punto de vista, la persistente desaceleración del crecimiento económico es un desafío para la economía colombiana. «Las reformas estructurales para mejorar la competitividad y crear nuevas fuentes de crecimiento serían importantes para restablecer el crecimiento. Un crecimiento más débil también tendría implicaciones para la consolidación fiscal de Colombia y su capacidad para cumplir objetivos fiscales a mediano plazo. Además, Colombia probablemente enfrentará retos para reducir el déficit fiscal del Gobierno a 1,5 % del PIB para 2022, sin medidas adicionales en los ingresos o gastos», explicó Maziad.
Para ella, reducir el déficit fiscal y convergir hacia los objetivos fiscales a mediano plazo sería un elemento clave para preservar la fortaleza fiscal de Colombia y estabilizar la carga de la deuda en los próximos dos o tres años. «Esperamos que se necesiten medidas adicionales de reforma para alcanzar esos objetivos», afirmó.
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