Con mucha frecuencia las empresas le exigen a la persona que aspira a ser contratada que se practique exámenes médicos de ingreso, cuyo propósito principal consiste en determinar las condiciones generales de salud de los aspirantes a un puesto de trabajo.
Con mucha frecuencia las empresas le exigen a la persona que aspira a ser contratada que se practique exámenes médicos de ingreso, cuyo propósito principal consiste en determinar las condiciones generales de salud de los aspirantes a un puesto de trabajo.
Los exámenes de ingreso a una empresa, denominados “preocupacionales” o “preingreso”, se encuentran regulados a través de la Resolución 2346 de 2007. El propósito de practicar estos exámenes consiste en que el empleador conozca las condiciones generales de salud (físicas, mentales y sociales) del trabajador, antes de que sea contratado. Así mismo, dichos exámenes deben ser aplicados en función del ambiente al cual el trabajador se encontrará expuesto en el sitio de trabajo, a su perfil y las labores que desempeñará.
Así pues, es muy común que las empresas exijan a la persona que aspira a ser contratada que se practique exámenes médicos de ingreso. Si bien esto es legal, deben cumplirse determinados lineamientos exigidos por la ley laboral, como, por ejemplo, que el empleador debe contratar directamente con el centro médico que realizará el respectivo examen de ingreso, así como asumir en su totalidad el costo de este.
Este tema de gran importancia es abordado en nuestro especial laboral Proceso de contratación y práctica de exámenes preocupacionales, un informe muy completo en el que también podrás encontrar los siguientes temas:
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