Gabriel Gaitán afirma que uno de los retos que tiene la IASB es alinear y articular el Estándar para Pymes con el Estándar Pleno.
Para él, no todas las entidades del grupo 1 deberían estar allí, al igual que no todas las del grupo 3 deberían estarlo.
Gabriel Gaitán afirma que uno de los retos que tiene la IASB es alinear y articular el Estándar para Pymes con el Estándar Pleno.
Para él, no todas las entidades del grupo 1 deberían estar allí, al igual que no todas las del grupo 3 deberían estarlo.
Uno de los nuevos integrantes nombrados el 8 de julio de 2020 por la IASB para que haga parte del Grupo de Implementación de Pymes –SMEIG, por sus siglas en inglés– es el contador público colombiano Gabriel Gaitán León.
Gaitán León fue consejero del CTCP, es magíster en Administración y Dirección de Empresas, profesional que cuenta con amplios conocimientos en administración, dirección y consultoría empresarial, particularmente en asuntos relacionados con Normas Internacionales de Contabilidad –NIC–, de Información Financiera –NIIF–, de Auditoría –NIA– y de Aseguramiento de la Información –NAI–.
En #CharlasConActualícese explicó que el SMEIG tiene dos objetivos. El primero, actualizar el Estándar Internacional para Pymes, y hacerlo por lo menos cada cinco años. El segundo, servir de organismo consultor para quienes tengan inquietudes alrededor de estos Estándares Internacionales; se encargaría de llevar dichas inquietudes al IASB para que la entidad emita las debidas respuestas.
Gaitán León afirma que hoy hay 150 países en el mundo que aplican el Estándar para Pymes. Uno de los retos que tiene la IASB es alinear y articular el Estándar para Pymes con el Estándar Pleno. «No se trata de equiparar», indica.
Recalca que la inmensa mayoría de las empresas de América Latina deberían estar aplicando el Estándar para Pymes, lo que supone una menor carga de revelaciones, asuntos que podrían significar costos o esfuerzos desproporcionados.
«El desafío es grande por la gran cantidad de cambios que ha habido en el Estándar Pleno. Las NIIF 15, 16 y 17 marcan una diferencia respecto a lo que se tenía anteriormente. Los cambios que se vienen incorporando a la NIIF 9 y a la NIIF 3 también», explica.
En este punto es muy importante el trabajo de los miembros del SMEIG al captar todas las necesidades que hay alrededor de la preparación y presentación de la información de propósito general, de tal manera que se pueda construir un documento para presentarlo al IASB, uno que goce de todos los requerimientos.
Gaitán León dice que desde la IASB observan que América Latina es el gran impulsador del marco técnico del Estándar para Pymes, ya que se viene incorporando fuertemente a través de convergencia, en los diversos países de la región.
«Se espera entonces una gran afluencia de comentarios y colaboraciones desde esta región para moldear mejor el nuevo Estándar para las Pymes, que el próximo año se debería estar emitiendo, para una aplicación obligatoria a partir de 2022», puntualiza.
Gaitán León recalca que, en la medida en que nos podamos articular con agremiaciones, personas y entidades que estén interesadas en contribuir con el proceso, mucho mejor, para que los comentarios realizados se tengan en cuenta y se incorporen en el ordenamiento.
Gaitán León indica que en Colombia hay 1.900.000 entidades formalmente constituidas, de las cuales 10.000 pertenecen al grupo 1 y más de 60.000 al grupo 2. Lo que quiere decir que el 99 % pertenecen al grupo 3.
Él cree que en Colombia muchas más entidades deberían estar aplicando el Estándar para Pymes.
«No todas las que están hoy en el grupo 1 deberían estar allí, y no todas las que están en el grupo 3 deberían estar allí. Hay muchas que deberían estar en el grupo 2, pero todavía no lo están», puntualiza.
Puntualiza que si una entidad está en el grupo 1 nunca encontraremos la razón del por qué desea pasarse al grupo 2, puesto que es innecesario, pero sí hay muchas razones por las que entidades del grupo 3 deberían estar en el grupo 2.
Recalca que, para todas las entidades que están en los grupos 1 y 2, en este momento es necesario (están todos los indicios) para que hagan la evaluación del deterioro; el problema es saber en qué momento hacerlo. Si se hace ahora, en un mes lo tendrán que continuar porque el confinamiento no ha terminado y en los activos se seguirá presentando deterioro.
«Lo recomendable es hacer una o dos evaluaciones durante este semestre, particularmente al cierre del año sí o sí, y otra para presentar una realidad económica ajustada a lo que está ocurriendo», dice Gaitán León.