Sandra Fetecua explica que, al ver los estados financieros, el contador público se da cuenta cuando las cifras están bien o mal, y de esta manera puede desarrollar ciertas proyecciones.
A muchos contadores públicos, sobre todo de empresas pequeñas, los gerentes les echan la culpa si hay pérdidas.
Sandra Fetecua explica que, al ver los estados financieros, el contador público se da cuenta cuando las cifras están bien o mal, y de esta manera puede desarrollar ciertas proyecciones.
A muchos contadores públicos, sobre todo de empresas pequeñas, los gerentes les echan la culpa si hay pérdidas.
Sandra Fetecua, contadora pública, maestrante en Contabilidad Internacional y de Gestión, y Gerente Especialista de Normas Internacionales de Información Financiera en Postobón, afirma en #CharlasConActualícese que el contador público juega un papel fundamental en el desarrollo de toda empresa.
«Todo empresario debe contar con un contador para que lo guíe y le elabore la información financiera a través de la cual se muestre la realidad de su empresa», afirma.
Dice que los contadores deben velar por que la elaboración de los estados financieros sea clara y transparente: el reflejo real de la situación económica de la empresa.
«A muchas empresas les da temor mostrar las pérdidas, le dicen al contador que maquillen las cifras. No se trata de dar a conocer las pérdidas sino de que el contador informe las novedades de forma oportuna».
Advierte que la administración es la encargada de evaluar la premisa de negocio en marcha, pero esta persona se va a apoyar en las cifras que le presente el contador.
«Si un contador público hace bien su trabajo, si tiene estados financieros fidedignos, estos le servirán de apoyo al administrador».
A muchos contadores públicos, sobre todo de empresas pequeñas, los gerentes les echan la culpa si hay pérdidas, por lo que «no hay que tener miedo de decirle a un gerente que están perdiendo y que se están enfrentando a una insolvencia grande», indica.
Invita a todos los empresarios para que se apoyen en el profesionalismo del trabajo del contador. Y al contador le dice que no tema decir al empresario que está perdiendo porque simplemente se está reflejando la realidad.
Fetecua es tajante al afirmar que el contador que haga el registro débito y crédito es un auxiliar muy bien pagado, pero el contador público debe ser integral, debe arriesgarse y conocer un poco más.
«Uno debe tener claro que la información es predictiva, confirmativa y tiene sus valores. Al ver los estados financieros, el contador público cuenta con un historial y así se da cuenta cuando las cifras están bien o mal, y de esta manera prevé ciertas proyecciones», explica.
Ahora, si el contador no tiene experiencia frente a lo anterior, no hay que arriesgarse sin tener unas bases muy fuertes para decir que una compañía sigue adelante o no.
«Uno puede apoyar, hacer presupuestos, orientar, pero si no se tiene el conocimiento y experticia es mejor no hacerlo», advierte.
Detrás de una decisión o de una información financiera que entrega un contador, recalca ella, hay una responsabilidad social, la cual trasciende para que las personas tomen decisiones. Ese es el valor que tenemos los contadores, dar fe pública.
En este punto, Fetecua recuerda que evaluar la hipótesis de negocio en marcha no es un tema de contadores sino del administrador, apoyado, por supuesto, en un contador público.
«La administración es la que determina, en la parte operativa, si se cuenta con los recursos para continuar o no. Si tienen la intención de continuar o no. Si están dispuestos a hacer una capitalización, a dar un paso adelante que pueda comprometer el patrimonio de la compañía».
Afirma que todo contador debe evaluar conceptos financieros, operativos y legales apoyados en cifras. El contador debe tener clara cuál es la premisa del negocio en marcha apoyado en factores que debe evaluar la administración.
Concluye diciendo que lo más importante que debe tener claro un contador público es el marco técnico-normativo. «Si no se tienen claros los criterios de reconocimiento y de medición, no se contará con estados financieros claros, pero esas premisas se confirman con las cifras que se tienen, apoyadas en lo que decida la administración».