El Banco Caja Social hizo un análisis con base en 231.571 clientes pensionados. Mientras el 68 % de dichos clientes usa tarjeta débito, el 32 % restante todavía tiene talonario, lo que indica que se viene perdiendo el temor al uso de la banca digital, aunque persisten ciertos mitos.
El Banco Caja Social hizo un análisis con base en 231.571 clientes pensionados. Mientras el 68 % de dichos clientes usa tarjeta débito, el 32 % restante todavía tiene talonario, lo que indica que se viene perdiendo el temor al uso de la banca digital, aunque persisten ciertos mitos.
Los adultos mayores son una población que tiene una dinámica económica particular, ya que la tercera edad está creciendo a un ritmo importante. Sin embargo, no sucede lo mismo con el número de personas que cotizan al sistema y tienen un trabajo formal. Un análisis realizado por el Banco Caja Social, con base en 231.571 clientes pensionados del banco, describe que son una población caracterizada por la tendencia al ahorro, sobre todo a largo plazo.
Mientras el 68 % de los clientes pensionados del banco usa tarjeta débito, el 32 % restante todavía tiene talonario, lo que es sinónimo de que las tarjetas están comenzando a ganar la “pelea”, disminuyendo gradualmente el temor a emplear medios electrónicos.
Según la entidad bancaria, «los días de mayor movimiento en las cuentas de pensionados es cuando se hacen los abonos de pensión, es decir, los últimos días del mes, y los tres primeros es cuando se hacen la mayor cantidad de retiros, lo que demuestra que todavía está vigente el mito aquel de que si no se retira el dinero los días siguientes al abono se va a bloquear o inactivar la cuenta, temiendo quedarse sin efectivo».
Frente a lo anterior, para que se bloquee o inactive la cuenta deben pasar al menos seis meses sin que se registre movimiento alguno. También debe saberse que los abonos realizados por las entidades de pensión se consideran movimientos financieros y no se congela la cuenta, así no hagan ningún retiro.
El análisis del Banco Caja Social refleja que el índice de endeudamiento de las personas de más de 75 años es de 16,4 %, mientras que el de las personas entre 55 y 64 años es de 37,6 % (alguna deuda de crédito); claramente manejan una mayor propensión a endeudarse. El 30 % de pensionados entre 55 y 75 tiene deuda de algún tipo, mientras que el 70 % restante no tiene ninguna.
Cuando se trata de guardar dinero, el 90 % de los clientes pensionados de más de 55 años tiene algún producto de ahorro, sobre todo a largo plazo, pues les gustan las inversiones a más de 90 días. Al examinar sus saldos, a medida que aumenta la edad crece la intención de ahorro. De quienes usan productos de captación, la mayor participación en volumen de ahorro está en los CDT. El dinero en montos de CDT supera, por mucho, los de aquellos clientes que tienen cuentas, lo cual demuestra que los clientes pensionados de más de 55 años usan sus cuentas de ahorro más como productos transaccionales y para gastos del día a día.
En este análisis del comportamiento de 231.571 clientes pensionados del Banco Caja Social, cifra que corresponde al 10 % del total de su mercado, se destaca que del volumen de ahorro total de los usuarios persona natural (6,4 billones de pesos) el 19 % corresponde a los ahorros que hacen los pensionados con un total de 1,2 billones.
Según el Reporte de inclusión financiera 2018, elaborado por la Banca de las Oportunidades y la Superintendencia Financiera: