Un desafío para el contador es conocer las nuevas tecnologías y acompañar las modificaciones normativas.
Profesionales contables deben comprender la importancia de la digitalización en los negocios.
El uso inteligente de la tecnología puede optimizar procesos y generar oportunidades para sus clientes.
Un desafío para el contador es conocer las nuevas tecnologías y acompañar las modificaciones normativas.
Profesionales contables deben comprender la importancia de la digitalización en los negocios.
El uso inteligente de la tecnología puede optimizar procesos y generar oportunidades para sus clientes.
El artículo Cómo convertirte en el contador del futuro, de Thomson Reuters, indica que los contadores públicos necesitan actualizarse y comprender que los procesos ya no son como antes: analógicos, con el registro hecho por medio de documentos impresos.
«La contabilidad 4.0 desafía al contador a incorporar diferentes herramientas y mucha más tecnología en la contabilidad», afirma.
Por medio de la cloud computing, por ejemplo, el estudio contable puede garantizar el almacenamiento de todos los tipos de documentos, con total disponibilidad y accesibilidad a cualquier hora y lugar. Además, la computación en la nube asegura la confiabilidad, la integridad y la autenticidad de los documentos.
La posibilidad de ejecutar y entregar obligaciones fiscales electrónicamente es otro punto que destaca la contabilidad del futuro. El uso de archivos XML simplifica las rutinas de trabajo de los contadores que pueden acceder a los documentos en diferentes sistemas, optimizando los procesos de los estudios.
De la misma forma, un sistema de gestión contable es igualmente innovador, ya que un software le presenta y le permite al contador del futuro una visión de 360° de los costos y de los rendimientos obtenidos por sus clientes.
«Lo anterior permite que el profesional analice el patrimonio y el desempeño financiero de una empresa de manera más rápida y estratégica. Por lo tanto, el contador y su equipo tienen condiciones de orientar a los clientes en una jornada de mejoras en la gestión que, ciertamente, elevará la curva de crecimiento de las empresas. La contabilidad consultiva entrega inteligencia fiscal», indica el artículo.
El contador tiene el reto de aprender a utilizar las herramientas disruptivas, incorporándolas a la rutina y a los procesos contables. El artículo plantea tres consejos que lo ayudarán a preparase para la contabilidad del futuro.
Uno de los principales desafíos del contador es conocer las nuevas tecnologías y acompañar las modificaciones normativas. Solamente así estará en condiciones de garantizar un servicio de excelencia a sus clientes.
Además, el uso inteligente de la tecnología puede eliminar la burocracia, optimizar procesos y generar oportunidades para sus clientes. De esta forma, se le entrega un trabajo con alto valor agregado.
Si ya acompaña las tendencias y busca actualización constante, es necesario incentivar a su equipo de trabajo para que tenga el mismo comportamiento. Es fundamental que los profesionales contables comprendan la importancia de la digitalización del negocio.
Al final, la contabilidad del futuro exige la actuación de personas mucho más proactivas, flexibles y dinámicas en los procesos. Eso porque las cosas han cambiado – y permanecen cambiando – en un ritmo veloz. No existe tiempo para resistencia o dificultad de adaptación de los profesionales.
Por lo tanto, invierta en concientización y entrenamiento, así como en preparación del equipo para el futuro.
«Más allá de enfocar los esfuerzos para la entrega de las obligaciones fiscales, el contador tiene potencial para convertirse en un consultor contable, colaborando con sus clientes en una jornada de crecimiento constante. Esta es una excelente estrategia para aumentar la confianza de su cliente y construir alianzas sólidas», indica el artículo.
Es posible hacer más que contabilidad e impuestos. Se puede invertir en segmentación, es decir, escoger un nicho. Existen en el mercado varios estudios contables que actúan siguiendo esta línea, por ejemplo, hay quienes prestan servicios para clientes de un único segmento como salud, educación y microempresas.
Al escoger este camino, el contador y su equipo pasan a tener más dominio y seguridad realizando así su trabajo con una calidad superior. Además, la segmentación lleva al aumento de productividad y oportunidades.