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Reforma tributaria: ¿es el impuesto de normalización tributaria un patrocinador de la evasión?

Eleonora Lozano dice que se ha endurecido la omisión del agente retenedor, pero al mismo tiempo se dan normalizaciones y amnistías tributarias.

Leopoldo Fergusson afirma que, de ser aprobada la propuesta, el castigo a quienes cometan este tipo de evasión tributaria debe ser más severo.

Fecha de publicación: 24 de agosto de 2021 Reforma tributaria: ¿es el impuesto de normalización tributaria un patrocinador de la evasión?
Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Eleonora Lozano dice que se ha endurecido la omisión del agente retenedor, pero al mismo tiempo se dan normalizaciones y amnistías tributarias.

Leopoldo Fergusson afirma que, de ser aprobada la propuesta, el castigo a quienes cometan este tipo de evasión tributaria debe ser más severo.

A través del proyecto de reforma tributaria, como estrategia de recaudo transitorio, el Gobierno nacional busca apostarle a una nueva jornada de normalización de activos. El objetivo con este tributo es recaudar en 2021 unos 300.000 millones de pesos y 360.000 millones de pesos en 2022.

Se busca que los contribuyentes declaren y formalicen activos omitidos y/o pasivos inexistentes con el impuesto de normalización. Según indica el proyecto:

Con la finalidad de fortalecer la capacidad de fiscalización de la Dian, disminuir la evasión y fomentar la inversión en el país, se establece un impuesto transitorio para regularizar los activos omitidos y/o pasivos omitidos.

La tarifa del impuesto será del 17 %, superando por 2 puntos porcentuales a la aplicable para la vigencia 2020.

Adicionalmente, para “facilitar, acelerar y asegurar el recaudo bajo los principios de eficiencia y equidad tributaria”, este tributo estará sujeto a un anticipo del 50 % de su valor, que se pagará en 2021 y será calculado sobre la base gravable estimada de los activos omitidos o pasivos inexistentes del contribuyente al momento de la entrada en vigor del presente proyecto de ley.

Pese a la propuesta, ya se han escuchado voces que lo consideran perjudicial.

Se está enviando un mensaje erróneo

En Portafolio, Eleonora Lozano, decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, afirma que en Colombia se debe trabajar en la cultura tributaria, ya que las últimas tres reformas han introducido medidas antiabuso, antielusión, y se han creado tipos penales de defraudación tributaria, de omisión de activos y declaración de pasivos inexistentes:

Hemos endurecido la omisión del agente retenedor, pero hemos mandado mensajes contradictorios, porque al mismo tiempo se dan normalizaciones y amnistías tributarias, que en últimas lo que hacen es premiar a los incumplidos.

Critica que, aunque el Gobierno dice que la normalización es para que esos activos omitidos y pasivos inexistentes tributen, lo hacen “a una módica tarifa del 17 %”, y asegura que, aunque el argumento del Gobierno es generar eficiencia, se manda un mensaje erróneo pues si se siguen dando oportunidades de normalización los contribuyentes seguirán contando con oportunidades para continuar evadiendo.

¿Tratamiento favorable a la evasión de impuestos?

En el análisis Una lectura en detalle de la nueva reforma tributaria, elaborado por el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, se afirma que el articulado del proyecto podría mejorarse con la eliminación de la normalización tributaria. Según el análisis de la entidad:

Se propone no aprobar la normalización tributaria que propone el proyecto. ¿En qué consiste esta figura? La gabela permite que quienes hayan ocultado activos los legalicen pagando un impuesto de normalización. La tarifa que se plantea es 17 %. No obstante, la base gravable sería del 50 %, lo cual implica que la tarifa efectiva podría quedar en 8,5 %, dándoles a quienes ocultaron capitales un tratamiento aún más favorable que el dado a quienes sí cumplen la ley.

Para el Observatorio, la medida puede enviar la señal a los evasores de que cumplir con sus obligaciones tributarias es mal negocio, premiando estrategias agresivas de planeación tributaria que le apuestan a un tratamiento favorable de la evasión de impuestos.

Castigo para quienes cometan evasión tributaria debe ser más severo

“normalización tributaria no puede convertirse en el mensaje a los evasores de que siempre habrá otra oportunidad para recibir un indulto por el desfalco al fisco”

Leopoldo Fergusson, director del Centro de Estudios sobre Desarrollo Económico –Cede– de la Universidad de los Andes, asegura en La República que la normalización tributaria no puede convertirse en el mensaje a los evasores de que siempre habrá otra oportunidad para recibir un indulto por el desfalco al fisco.

De ser aprobada la propuesta, el castigo a quienes cometan este tipo de evasión tributaria debe ser más severo. Acudir a esa zanahoria, por lo tanto, debe acompañarse con el garrote de consecuencias serias, incluso penales, que hoy solo aparecen para desfalcos multimillonarios y en una regulación sin dientes.

¿Premio para evasores?

Por su parte, el senador Wilson Arias, a través de medios de comunicación, criticó la propuesta.

No puede ser que mientras el empresario honesto paga 31 % sobre las utilidades, la reforma tributaria y su normalización tributaria premien al evasor permitiéndole pagar solo 17 % de dicho impuesto.

Sostuvo, además, que ante “la trampa” de ocultar bienes “el evasor mínimamente debería pagar el mismo 31 % o ir a la cárcel”.

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