Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Para Nicolás Rodríguez, pasarelas de pagos deben garantizar el almacenamiento correcto de datos de los compradores.
Marcos Gutiérrez dice que el cibercrimen tiene organizaciones estructuradas y personal que sofistica el delito.
Preocupa la brecha en seguridad por alta demanda del comercio electrónico.
El informe Tendencias Cibercrimen – Colombia 2019-2020, elaborado por la Policía Nacional, indica que los ataques que comprometen cuentas empresariales tienen un promedio de pérdidas por fraudes entre los 300 y 5.000 millones de pesos. La suplantación de identidad es una de las modalidades favoritas de los ciberdelincuentes en este segmento, alcanzando el 60 %.
En lo relacionado con el e-commerce, como lo indica la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico, el sector creció entre 50 % y 80 % durante la cuarentena, y los comerciantes afirman que los pedidos de domicilio de alimentos o farmacia han tenido un crecimiento superior a un 600 %, lo que abre las brechas en materia de seguridad por la alta demanda.
Por todo lo anterior, es necesario que los comercios que emplean mecanismos de venta virtual se asesoren en el manejo de tecnología de punta, métodos de pago y certificaciones de seguridad.
Sin lugar a duda, así como el comercio electrónico se ha incrementado de forma exponencial, los delitos informáticos también.
Nicolás Rodríguez, country manager de Openpay en Colombia, afirma que las empresas tienen que ser conscientes de la importancia que juegan las pasarelas de pagos como garantes del almacenamiento correcto de los datos de los compradores y, además, de su rol en los estándares de seguridad.
«Para evitar ser víctimas de fraude, los comercios deben validar que las pasarelas de pago apliquen tecnología de última generación como modelos de machine learning e inteligencia artificial para calificar de manera inmediata la probabilidad de robo en las transacciones que están entrando a su página web”, explica.
Otro aspecto a tener en cuenta es que una pasarela de pago certificada minimiza las probabilidades de fraude bloqueando transacciones sospechosas.
«Eso también significa que los datos de los consumidores se almacenan de manera adecuada y segura. Los empresarios no pueden olvidar que el comercio electrónico en un proceso completo; va desde que el cliente entra a su página web y finaliza con la entrega del producto o servicio. Es esencial que todas las empresas ajusten muy bien sus procesos de entrega de productos o servicios”, especifica Rodríguez.
Las llamadas telefónicas, mensajes de texto, correos electrónicos y páginas web falsas son las herramientas preferidas para realizar actividades delictivas a través de la sustracción de información bancaria.
Marcos Gutiérrez, arquitecto de soluciones de Sonda Colombia, indica lo siguiente:
“El cibercrimen tiene organizaciones muy estructuradas y líderes, especialistas y personal que sofistica el delito, incluso tienen encargados para manejar presupuestos. El crimen cibernético tiene como objetivo obtener el mayor botín con el mínimo esfuerzo e inversión. Se evidencia que más del 75 % provienen de grupos organizados con objetivos económicos”.
Las personas que han encontrado en el e-commerce un aliado para adquirir productos y servicios deben tomar algunas precauciones básicas a la hora de realizar compras.
Entre dichas precauciones, es importante destacar una relativamente sencilla: revisar en la URL, parte superior de la página web, que sea un sitio seguro, sobre todo cuando se van a realizar pagos. Esta verificación consiste en constatar que aparece el candado o el mensaje de sitio seguro seguido por la URL.
Es aconsejable comprar en comercios que generen confianza, revisar si tienen una historia en redes, leer los comentarios sobre las experiencias de otros clientes, observar si cuentan con líneas de contacto, correos electrónicos y números de soporte.
“Siempre el responsable es el comercio, dando la obligación de ajustar todos los procesos en los que interviene que van desde el momento mismo que el cliente llega a la página web, realiza pagos y debe hacerse responsable también del proceso de delivery, en ese punto hay que organizar el archivo de la evidencia para poder demostrar todo lo que hizo como sitio e-commerce estuvo bien hecho”, afirma Rodríguez.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
