Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
En el momento en que un contador público y una entidad (empresa o persona natural) se encuentren negociando la prestación de un servicio contable deben considerar, entre otros puntos, que el contador tenga la suficiente experiencia y que se encuentre habilitado para ejercer la profesión.
A continuación, abordamos algunos aspectos que deben tener en cuenta los contadores públicos y sus clientes al momento de suscribir un encargo.
El área del ejercicio profesional del contador público es una de las más amplias. Por eso, cuando se requiera contratar a un contador público es necesario verificar que este cuente con los conocimientos y con la experiencia requerida para desempeñarse en el sector y en el tipo de empresa del que se trate.
De esta forma, tanto el contador público como la entidad que contrata los servicios del contador público podrán tener confianza y tranquilidad de que las labores se llevarán a cabo en el momento oportuno y con la calidad necesaria.
Mientras el contador público y su cliente se encuentran negociando la prestación de un servicio contable es fundamental que exista buena comunicación entre ambas partes, de forma que se puedan tener claras cuáles son las necesidades del cliente, si la contabilidad está al día o se encuentra atrasada, si existen declaraciones tributarias sin presentar, y cuáles son los honorarios que recibirá el contador.
Al atender estas recomendaciones pueden evitarse sorpresas desagradables en el desarrollo de la prestación del servicio.
Para profundizar en este tema le recomendamos nuestro editorial Conozca qué debe tener en cuenta un contador al momento de aceptar un contrato con un cliente.
El certificado de antecedentes es un documento emitido por la Junta Central de Contadores –JCC–, en el que se informa si el contador público o la sociedad de contadores públicos se encuentran habilitados para prestar los servicios propios de la ciencia contable.
El contador público o la sociedad de contadores públicos deben tener en cuenta este certificado, ya que si ejercen la profesión mientras exista una inhabilidad para prestar servicios contables por haber sido sancionados por la Junta Central de Contadores –JCC– podrían exponerse a sanciones.
El numeral 2 del artículo 26 de la Ley 43 de 1990 señala que una de las causales de cancelación de la tarjeta profesional es ejercer la profesión durante el tiempo de la suspensión.
Por su parte, la entidad que esté pensando en contratar al contador público debe verificar que este se encuentre habilitado para asegurarse de que su firma tenga validez en caso de que se requiera para declaraciones tributarias, para la certificación o dictamen de estados financieros, o en cualquier otro documento al que está asociada la firma y la tarjeta profesional del profesional contable.
Por el 2020, y de acuerdo con la Resolución 002097 de 2019 de la JCC, los certificados de antecedentes disciplinarios de los contadores públicos y de las entidades que presten servicios propios de la ciencia contable tendrán un costo de $31.000 y $57.000, respectivamente.
En la siguiente infografía podrá encontrar el costo de los otros trámites que realizará la JCC por la vigencia 2020:
El certificado se puede pagar por PSE o realizando la consignación en la respectiva ventanilla. Al respecto, puede encontrar más información en la página de la JCC (https://www.jcc.gov.co/).
Una vez recibido el certificado de antecedentes es posible verificar su validez accediendo en el siguiente enlace y digitando la cédula del contador público o el NIT de la sociedad de contadores públicos, junto con el número del certificado.
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