Para David Riascos, el Gobierno podría flexibilizar transitoriamente las medidas incorporadas en la legislación tributaria en las últimas reformas.
Se pueden limitar las deducciones por pagos en efectivo, exigir facturas y documentos equivalentes como soportes para deducciones en algunos sectores.
Para David Riascos, el Gobierno podría flexibilizar transitoriamente las medidas incorporadas en la legislación tributaria en las últimas reformas.
Se pueden limitar las deducciones por pagos en efectivo, exigir facturas y documentos equivalentes como soportes para deducciones en algunos sectores.
El COVID-19 ha hecho que las personas jurídicas se pregunten a diario qué deben hacer para mantenerse a flote, motivo por el cual le solicitan al Gobierno nacional plazos para pagar sus deudas, créditos e inyección económica para producir y así evitar que deban despedir empleados.
El tema tributario también es algo que les da vueltas en la cabeza, por lo que nace la pregunta: “¿Cuáles medidas pueden hacer falta para aliviar la carga tributaria, sobre todo para las empresas?”
David Riascos Vargas, director de Derecho Tributario, Cambiario y Aduanero en MRG Legal, indica que hoy por hoy hay dos elementos que los empresarios están analizando y que tienen particular incidencia en el mantenimiento y generación de empleo.
«El primero es el replanteamiento de los modelos de negocio en elementos como la generación de ingresos, los canales de distribución y, en algunos casos, la propuesta de valor. El segundo es la liquidez y disponibilidad de efectivo de la entidad», explica.
Los dos elementos, desde su punto de vista, podrían ser evaluados por el Gobierno nacional desde la perspectiva tributaria, con el fin de generar políticas que permitan aumentar las opciones de los empresarios al momento de tomar decisiones.
«Por supuesto, no hay que perder de vista el hecho de que no puede afectarse el recaudo tributario y causar un mayor impacto en la regla fiscal», puntualiza.
Frente al replanteamiento de los modelos de negocio, Riascos afirma que el Gobierno podría flexibilizar transitoriamente diversas medidas que se han incorporado en la legislación tributaria en las últimas reformas, como son la limitación a las deducciones por pagos en efectivo, la exigencia de facturas y documentos equivalentes como soporte para deducciones en algunos sectores, la retención de IVA en los pagos al exterior para expensas necesarias para la operación virtual (diferentes a servicios de computación en la nube que están excluidos), entre otros.
Desde su punto de vista, y frente a temas relacionados con la liquidez y disponibilidad de efectivo, el Gobierno nacional podría estudiar e implementar estrategias como: