Según el Decreto Ley 639 de 2020, las empresas deben demostrar que su facturación ha disminuido un 20 % o más frente a abril de 2019.
No importa el tamaño de la empresa para acceder a los recursos.
El cálculo para el pago se hace multiplicando el número de empleados por el 40 % del salario mínimo.