Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Algunas propuestas para una futura reforma tributaria: impuestos para las mayores fortunas del país es la de Gustavo Petro; Óscar Iván Zuluaga disminuiría exenciones tributarias.
Precandidatos les apostarían a los impuestos verdes, a una regla fiscal clara y una tributación coherente para las empresas.
Los precandidatos presidenciales de Colombia están dando a conocer sus puntos de vista e ideas en su aspiración por llegar a las urnas como los favoritos.
Uno de los temas socializados es el de los impuestos y la necesidad de debatir una nueva reforma tributaria.
Gustavo Petro y Óscar Iván Zuluaga han confirmado que en sus planes está adelantar una reforma fiscal. Por su parte, Alejandro Gaviria ha dicho que se debe trabajar en una reforma estructural, «deuda pendiente que se tiene de tiempo atrás».
Durante la realización de la XXXVI Asamblea General de Anif, Gustavo Petro aseguró que, para enfrentar las dificultades fiscales en un país caracterizado por la desigualdad, se deben gravar las rentas de los impuestos que pagan las 4.000 mayores fortunas del país.
De igual forma, el precandidato de la Colombia Humana ha propuesto subir aranceles con tasas al carbón a las importaciones y gravar la economía petrolera y carbonera con mayor fuerza. También puntualizó en el impuesto a los dividendos y a la tierra improductiva.
Por su parte, Óscar Iván Zuluaga, candidato del Centro Democrático, dijo que en la reforma tributaria se deben contemplar menos tarifas para las empresas, las cuales se financiarían con la disminución de beneficios tributarios, y así generar más empleo y competitividad.
En cuanto a las prioridades económicas, dijo que se debe mantener la independencia del Banco de la República, tener un crecimiento sostenido del PIB por encima del 5 % e impulsar las exportaciones de alimentos, turismo y bienes industriales semielaborados.
En entrevista con el diario Portafolio, el exministro de Hacienda y hoy candidato presidencial Juan Carlos Echeverry dijo que, si es elegido presidente, cambiaría el tipo de tributación que tenemos:
Empezaría la reforma cambiando la filosofía, hoy crecemos para tributar y deberíamos tributar para crecer. Dejaría esa tasa del 35 % que se fijó ahora sobre el nivel de utilidades de 2019, y las que se tengan por encima de ese nivel se pondrían al 20 %.
Con la anterior propuesta, cada empresa se pondría su tasa de tributación en función del crecimiento de sus utilidades. Entre más crezcan, pagarían una tasa del 20 % por esas utilidades adicionales, lo que para Echeverry es una tributación coherente con el crecimiento de las empresas.
Juan Manuel Galán, en debate organizado por la Universidad Javeriana de Cali en noviembre, dijo que no se pueden seguir haciendo reformas tributarias cada 18 meses:
Esto envía un mensaje pésimo para espantar la inversión. Tenemos que apostarle a las grandes tendencias mundiales: la economía verde y a la ciencia, tecnología e innovación.
En entrevista con Forbes, Federico Gutiérrez dijo que cualquier Gobierno serio debe tener una regla fiscal clara y ver de qué forma cuidar las finanzas y garantizar los programas sociales, pero sin ahogar el sector productivo:
Por eso, cualquier reforma debe tener un amplio consenso y una sensatez real. Además, no puede afectar a los más vulnerables.
Uno de sus objetivos, si se llegara a discutir una reforma tributaria, es generar 1,2 puntos del PIB en promedio, 12 billones de pesos cada año.
Alejandro Gaviria, por su parte, al referirse a una reforma tributaria opina que una iniciativa de este tipo no resolverá los problemas fiscales de Colombia.
Para él, una reforma tributaria debe incluir impuestos verdes, bases tributarias más amplias, así como ampliar la base tributaria del IVA.
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