Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Sin importar la edad, los colombianos deben tener una cultura del ahorro desarrollada. Para los menores de edad, los padres son los llamados a llevarlos por ese camino y educarlos para que no se endeuden a medida que vayan creciendo. Los adultos mayores “la tienen clara” al momento de ahorrar.
Los adultos mayores son una población que tiene una dinámica económica particular, ya que la tercera edad está creciendo a un ritmo importante. Sin embargo, no sucede lo mismo con el número de personas que cotizan al sistema y tienen un trabajo formal. Un análisis realizado por el Banco Caja Social, con base en 231.571 clientes pensionados del banco, describe que son una población caracterizada por la tendencia al ahorro, sobre todo a largo plazo.
Mientras el 68 % de los clientes pensionados del banco usa tarjeta débito, el 32 % restante todavía tiene talonario, lo que es sinónimo de que las tarjetas están comenzando a ganar la “pelea”, disminuyendo gradualmente el temor a emplear medios electrónicos.
El índice de endeudamiento de las personas de más de 75 años es de 16,4 %, mientras que el de las personas de edades entre 55 y 64 años es de 37,6 %; claramente manejan una mayor propensión a endeudarse. El 30 % de pensionados cuyas edades oscilan entre los 55 y 75 años tiene deuda de algún tipo, mientras que el 70 % restante no tiene ninguna.
Cuando se trata de guardar dinero, el 90 % de los clientes pensionados de más de 55 años tiene algún producto de ahorro, sobre todo a largo plazo, pues les gustan las inversiones a más de 90 días.
Al examinar sus saldos, a medida que aumenta la edad crece la intención de ahorro. De quienes usan productos de captación, la mayor participación en volumen de ahorro está en los CDT. El dinero en montos de CDT supera, por mucho, los de aquellos clientes que tienen cuentas, lo cual demuestra que los clientes pensionados de más de 55 años usan en mayor medida sus cuentas de ahorro como productos transaccionales y para gastos del día a día.
Ahora, pasando al otro extremo, están los más pequeños. Porvenir, por ejemplo, con el objetivo de desarrollar productos que patrocinen desde temprana edad el ahorro, cuenta con Pensión Kids, un producto financiero con el que los padres de familia o el representante legal del menor podrán realizar un aporte único o periódico para construir las bases de su ahorro pensional.
Andrés Vásquez, vicepresidente comercial de Porvenir explica que esta alternativa permite, bajo la figura de afiliado voluntario, iniciar un ahorro para pensión desde temprana edad.
“Se trata de un producto pensado en el bienestar del mañana. Qué mejor manera de empezar a construir la pensión desde pequeños que con la ayuda de los padres y familiares. Queremos fomentar la cultura de ahorro entendiendo que entre más temprano comencemos a hacer aportes a pensión, mayores serán las posibilidades de mejorar la mesada pensional y de acceder a una pensión anticipada”, explica.
Los padres tienen la responsabilidad de enseñarle a sus hijos los distintos métodos de ahorro. Una alcancía puede ser la mejor opción para empezar, ya que pueden calcular cuánto llevan ahorrado y, en promedio, cuánto les falta para alcanzar su meta.Están también las cuentas de ahorro en los bancos. Como lo publica La República, Bancolombia y Banco de Bogotá piden un monto mínimo de apertura de $50.000; en BBVA el monto es de $30.000; Banco Caja Social pide un monto mínimo de $10.000; y Davivienda, Itaú y Scotiabank Colpatria no piden monto mínimo de apertura. Además, la mayoría están exentas del 4×1.000, por lo que no tendrán descuentos y se podrá ver la evolución del ahorro.
Sin importar qué edad tengamos, debemos tener la cultura y costumbre de ahorrar, para pensar no solo en el presente, sino en el futuro.
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