Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Muchos trabajadores de plataformas digitales no gozan de los derechos a la protección social, la libertad de asociación y de negociación colectiva.
Por otra parte, las horas de trabajo suelen ser prolongadas e imprevisibles.
En algunas plataformas hay brechas notables de remuneración.
En el último decenio las plataformas digitales de trabajo se han multiplicado cinco veces, un crecimiento que ha puesto sobre la mesa la necesidad de un diálogo alrededor de las políticas y cooperación en materia de reglamentación, que permita una actuación en favor de oportunidades de trabajo decente y el impulso del crecimiento de empresas sostenibles.
Según el más reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo –OIT– Perspectivas sociales y del empleo en el mundo: El papel de las plataformas digitales en la transformación del mundo del trabajo, las plataformas digitales están abriendo nuevas posibilidades, en particular para las mujeres, personas con discapacidad, jóvenes y personas que quedan al margen de los mercados laborales convencionales.
El informe plantea dos tipos principales de plataformas digitales de trabajo: las plataformas digitales web, en las que los trabajadores realizan sus tareas en línea y de modo remoto, y las plataformas basadas en la localización, en las que personas como choferes de taxis o repartidores ejecutan su trabajo en una localización geográfica determinada.
Según Guy Ryder, director general de la OIT:
Las plataformas digitales de trabajo están abriendo oportunidades que antes no existían, en particular para las mujeres, los jóvenes, las personas con discapacidad y los colectivos marginados en todo el mundo. Es un factor positivo. Los problemas nuevos que plantean deben solucionarse mediante el diálogo social internacional a fin de que los trabajadores, los empleadores y los gobiernos puedan beneficiarse plenamente y por igual de estos avances. Con independencia de su situación contractual, todos los trabajadores tienen que poder ejercer sus derechos laborales fundamentales.
El informe indica que la mitad de los trabajadores de plataformas digitales ganan menos de 2 dólares por hora. Además, en algunas plataformas hay brechas notables de remuneración. La pandemia se ha encargado de poner en mayor evidencia las anteriores cuestiones.
También existe competencia desleal, falta de transparencia respecto a los datos y la fijación de precios, además de comisiones costosas entre los empleados. Por su parte, las pequeñas y medianas empresas tienen dificultades para acceder a financiación y a infraestructura digital.
El informe publica que la distribución de los costos y beneficios de las plataformas digitales a nivel mundial es muy desigual. El 96 % de las inversiones en este tipo de plataformas se concentra en Asia, América del Norte y Europa. El 70 % de las ganancias se concentra en dos países: Estados Unidos y China.
El trabajo en plataformas digitales es externalizado por empresas del norte y realizado por trabajadores del sur que ganan menos que sus homólogos de los países desarrollados. Esta desigualdad de crecimiento de la economía digital perpetúa la brecha digital y podría agravar las desigualdades.
El informe puntualiza que el hecho de que las plataformas digitales de trabajo operen en gran cantidad de países plantea la necesidad de diálogo y coordinación a nivel internacional en torno a las políticas, y así conseguir la seguridad reglamentaria y la aplicación de las normas internacionales del trabajo.
La invitación de la OIT es que exista un dialogo social y se trabaje en materia de reglamentación entre las plataformas digitales de trabajo, los trabajadores y los gobiernos, para lograr con el tiempo la aplicación de una estrategia más eficaz respecto de una serie de objetivos con los cuales se logre:
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
