KPMG entrega 5 puntos clave para que las empresas familiares ejecuten de forma exitosa una estrategia de sostenibilidad.
Inversionistas e instituciones financieras están evaluando los niveles de riesgos ambientales, sociales y de gobernanza.
La sostenibilidad es un concepto que se ha venido consolidando en las empresas familiares del país. No pasa desapercibida y ha tomado fuerza en los últimos años. Hace referencia a los tres factores determinantes que una compañía debería incluir en sus procesos tanto internos como externos.
Hablamos del medioambiente, la parte social y la gobernanza –ESG, por sus siglas en inglés–. Según un estudio de J. P. Morgan, el 69 % de los inversores minoristas sienten interés por los factores ESG, y en el 2020 se invirtieron 304 millones de dólares para implementar energías renovables en las empresas.
KPMG en su estudio Bueno para los negocios y para el mundo afirma que, pese a lo anterior, en medio de las nuevas presiones competitivas los inversionistas y las instituciones financieras están evaluando los niveles de riesgo ESG y el éxito en el cumplimiento de las expectativas de los clientes como indicadores de desempeño.
Medir el impacto de las acciones que realizan las empresas en la sociedad es fundamental para la gestión de sus procesos y ayuda a dar forma al pensamiento de los equipos de liderazgo y los directores operativos.
Además, los fenómenos meteorológicos extremos, los impactos de la transición energética y las crisis humanitarias ocasionan que temas como la filantropía, los derechos humanos y la economía circular cobren cada día más relevancia en la gestión de los negocios.
Martín Escobar, líder de Private Enterprise de KPMG Colombia, afirma lo siguiente:
Las empresas familiares son un impulso muy importante en la economía nacional. Por esta razón, les damos un apoyo completo para su crecimiento exponencial, apuntándole a construir país y al desarrollo sostenible de la economía colombiana.
Ahora bien, existe la necesidad de una agilidad estratégica completa, pues la coyuntura mundial genera una preocupación a futuro que puede afectar el proceso de muchas compañías.
Desde KPMG se exponen 5 puntos clave para ejecutar, de forma exitosa, una estrategia de sostenibilidad:
Para Escobar, las empresas familiares deben articular con claridad sus estrategias de responsabilidad social y comunicar de forma abierta sus avances a colaboradores, clientes y otras partes interesadas.
Deben expresar los impactos económicos, sociales y medioambientales en una métrica financiera común que origine conversaciones productivas en el directorio y en la gerencia, y ayudar a cambiar la mentalidad y las acciones dentro de la organización.
Finalmente, es comprensible que muchas empresas familiares estén en las primeras fases del desarrollo de su estrategia de responsabilidad social y exploren las diversas tecnologías disponibles para seguir y medir el impacto de lo más importante.