Actualmente, el comercio electrónico constituye una herramienta útil para todo profesional, pues representa una forma fácil y rápida de llevar a cabo negocios vía internet, lo cual es de alta relevancia para el contador público, quien se encuentra totalmente vinculado con operaciones comerciales.
Actualmente, el comercio electrónico constituye una herramienta útil para todo profesional, pues representa una forma fácil y rápida de llevar a cabo negocios vía internet, lo cual es de alta relevancia para el contador público, quien se encuentra totalmente vinculado con operaciones comerciales.
El principal objetivo del comercio electrónico es conseguir que los clientes puedan acceder a los productos o servicios desde cualquier lugar y en cualquier momento. En este sentido, el comercio electrónico constituye una herramienta útil para el profesional contable, dado que, además de poder utilizarlo para comercializar sus servicios, constituye un elemento indispensable para su labor en la asesoría empresarial, debido a que sus potenciales clientes se enfrentan continuamente a situaciones cuya tendencia se enmarca en este tipo de negocios y sobre las cuales el contador debe tener total conocimiento.
A pesar de que el comercio electrónico no ha generado el nivel de seguridad y confianza para obtener una mayor masificación, el Gobierno nacional, a través de la norma de bancarización instaurada con el artículo 307 de la Ley 1819 de 2016 pretende incentivar el uso de estos canales, estableciendo que para que algunos gastos sean deducibles en el impuesto de renta estos deberán realizarse a través de medios financieros.