Desde el punto de vista de Pedro Sarmiento, pasarán muchos años para que Colombia tenga una reforma tributaria estructural.
El impuesto de normalización tributaria es un patrocinador de la reivindicación tributaria.
Las empresas deben comenzar a buscar estrategias para disminuir su tasa de tributación.
Desde el punto de vista de Pedro Sarmiento, pasarán muchos años para que Colombia tenga una reforma tributaria estructural.
El impuesto de normalización tributaria es un patrocinador de la reivindicación tributaria.
Las empresas deben comenzar a buscar estrategias para disminuir su tasa de tributación.
Pedro Sarmiento, socio director de impuestos y parte legal de Crowe Colombia, afirma en #CharlasConActualícese que la Ley 2155 de 2021 es una reforma tributaria puente, no estructural. Advierte que en muchos años no tendremos una reforma tributaria estructural.
Además, dice que se debe tener en cuenta que no es lo mismo un escenario tributario siendo Colombia un país que hace parte de la OCDE frente a lo que era anteriormente, donde no estábamos atados a una organización de esta envergadura. “La OCDE le señala a todo país que hace parte un derrotero que se debe cumplir”, señala.
Para él, esta es una reforma adoptada por el Gobierno para sufragar las necesidades económicas inmediatas:
Con cabeza fría, dentro de los análisis que se han dado alrededor del tema, el próximo Gobierno deberá trabajar en una nueva (reforma) y tocar puntos como, por ejemplo, que el IVA deberá ser reformado.
Sobre lo que plantea la reforma tributaria del impuesto de renta, afirma que el 80 % del recaudo del impuesto sobre la renta provendrá de las personas jurídicas, lo que nos pone debajo de otros países de la región y de países emergentes.
Por su parte, para las personas naturales, su impuesto de renta no tendrá cambio alguno. Este es un punto que deberá cambiar en una próxima reforma tributaria. Las personas naturales definitivamente deberán tributar más.
Cabe recordar que con la Ley 2155 de 2021 para las personas jurídicas se aumenta la tarifa del 35 % y se da la sobretasa al sector financiero de tres puntos sobre la tarifa del impuesto sobre la renta.
Sarmiento aconseja que las empresas deberán comenzar a buscar estrategias para disminuir su tasa de tributación. En este punto destaca el Decreto 1311 de octubre 20 de 2021, por el cual se establece una alternativa contable para mitigar los efectos del cambio de tarifa del impuesto de renta en el período gravable 2021.
Quienes opten por esta alternativa deberán revelarlo en las notas de los estados financieros indicando su efecto sobre la información financiera.
Contrario a lo que muchos analistas piensan, el impuesto de normalización tributaria no es un patrocinador de la evasión; desde el punto de vista de Sarmiento, este tributo es un patrocinador de la reivindicación tributaria:
Si la informalidad de la economía ha subido al 60 % por culpa de la pandemia y de los paros que se presentaron, es apenas lógico que el Estado genere llaves para que los contribuyentes normalicen su situación tributaria.
Agrega que después de una etapa tan dura por la que pasó el país, es una buena idea para quienes quieren estar a paz y salvo con el Estado. Simplemente se le está diciendo a las personas que declaren sus activos, paguen el 17 % del impuesto y luego sigan declarando normalmente.
Sarmiento tiene claro que lo más importante de la actual reforma tributaria es que debe tener un efecto sobre la disminución del desempleo en Colombia.
Poco a poco se van recuperando empleos con las medidas que se han venido adoptando. Lo que fundamentalmente pretende la reforma tributaria es tratar de salvar el empleo existente y que las empresas generen más.
Somos un país en pleno crecimiento y hay que trabajar en la consolidación de dicho crecimiento económico para que las cifras del PIB vayan por buen camino al finalizar este año.