La proporción de trabajadores informales aumentó en Colombia entre septiembre y noviembre del año anterior.
Las regulaciones tributarias han generado, sin que ese fuera su propósito, un esquema que termina subsidiando a la informalidad y gravando a las empresas formales, premiando al sector menos productivo y castigando al más productivo de la economía.
Uno de los mayores problemas de la sociedad colombiana es la evasión de impuestos.
El Estado trata de luchar contra la informalidad. Se sabe que la delincuencia organizada se esconde en ella, pero esto no quiere decir que todos los evasores sean terroristas o algo parecido.
Se deben flexibilizar y ajustar las normas que rigen el mercado laboral, para que puedan hacerle frente a los retos de la nueva economía. Así mismo, una tarea que conduzca a garantizar que los incrementos del salario mínimo no superen la suma de la inflación y la productividad.