Los estados financieros preparados bajo Estándares Internacionales muestran la realidad de la compañía al cierre de un período. Dada la naturaleza financiera de la información, es común que en muchas ocasiones deba hacerse uso de las matemáticas financieras para la medición de sus elementos.
Los estados financieros preparados bajo Estándares Internacionales muestran la realidad de la compañía al cierre de un período. Dada la naturaleza financiera de la información, es común que en muchas ocasiones deba hacerse uso de las matemáticas financieras para la medición de sus elementos.
A diferencia del marco de contabilidad anterior (Decreto 2649 de 1993), basado en el costo histórico y altamente influenciado por la normatividad fiscal, la información financiera bajo Estándares Internacionales se presenta con un enfoque distinto, con el ánimo de revelar cifras e indicadores que antes no se usaban, o que se usaban de forma distinta.
Las Normas Internacionales de Información Financiera contienen varios requerimientos, en los cuales se hace necesaria la aplicación de matemáticas financieras para la medición de diversas partidas de activos, pasivos, ingresos, costos y gastos. Algunas de esas referencias son las siguientes:
El párrafo 11.13 requiere que cuando una entidad adquiera instrumentos financieros en una transacción de financiación los mida inicialmente al valor presente de los pagos futuros descontados a una tasa de interés de mercado para un instrumento de deuda similar determinado en el reconocimiento inicial. Una transacción de financiación es aquella en la cual el plazo para pago es sustancialmente diferente al que se suele usar en el mercado, o bien una transacción en la cual el precio de contado y el precio por pago aplazado son distintos, debido precisamente al plazo concedido para pago.
El párrafo 11.14 establece que la medición posterior de instrumentos financieros de deuda debe llevarse a cabo utilizando el modelo del costo amortizado y el método del interés efectivo (el cual está explicado en los párrafos del 11.15 al 11.20). La utilización del método del interés efectivo conlleva que los costos asociados a la deuda, o los ingresos asociados a un préstamo se reconozcan en resultados con un porcentaje constante.
El párrafo 11.25 establece que la entidad debe medir el valor recuperable de los instrumentos financieros como el valor presente de los flujos de efectivo futuros descontados a la tasa de interés original del instrumento. Si este último no tiene tasa de interés imputada, se le aplicará la tasa de interés de mercado para un instrumento financiero similar, desde el punto de vista del deudor.
Para los demás instrumentos financieros debe medirse el valor recuperable como «la mejor estimación» de los flujos de efectivo futuros, lo cual, en muchos casos, requerirá la medición del valor presente de algún flujo futuro.
Los párrafos del 11.27 al 11.32 hablan sobre la medición del valor razonable, y una de las formas de medir este valor razonable es la medición de flujos de efectivo descontados.
La sección 13, que trata sobre los inventarios, establece que estos activos se miden por el costo. No obstante, si la adquisición es una transacción de financiación, entonces deberán medirse por el valor presente de los pagos futuros descontados a una tasa de interés aplicable a una transacción de financiamiento en las mismas condiciones, desde el punto de vista del deudor.
Este tema sobre la medición de activos por su valor presente es también aplicable a la adquisición de cualquier activo, tal como propiedades, planta y equipo, intangibles, activos biológicos, entre otros.
La sección 20, sobre arrendamientos, también nos lleva a utilizar razones financieras, especialmente para:
Juan David Maya Herrera
Consultor de Estándares Internacionales de Información Financiera
Certificación Internacional por el ICAEW en IFRS Full (NIIF Plenas)
Correo: jmaya@actualicese.co
*Exclusivo para Actualícese