El aumento anual de 25 semanas de cotización para pensión finalizó en 2015, por tanto, hasta que no se expida una nueva norma, las semanas a cotizar para pensión seguirán siendo 1.300.
Para 2018 el aporte a fondo de pensiones sigue siendo del 16% del ingreso base de cotización –IBC– del trabajador independiente y dependiente. Para dependientes, el aporte se divide en dos: un 12 % aportado por el empleador y un 4 % a cargo del trabajador.
Igualar las edades de jubilación entre hombres y mujeres, reformar la arquitectura del sistema, recionalizar los sistemas de pensiones y ampliar el alcance de mecanismos para la vejez como Colombia Mayor y los BEPS, son algunas de las propuestas que hizo en el tema de pensiones el grupo de expertos.
Iván Jaramillo, investigador del observatorio laboral de la Universidad del Rosario, opina que al Gobierno se le hizo tarde discutir una reforma pensional, ya que la idea era hacerlo en marzo con las recomendaciones de la OCDE, y que lograr un consenso entre los diversos actores es un obstáculo.
Miguel Largacha, presidente de Porvenir, hace un llamado urgente para que se ataque el problema pensional nacional. Para él, el sistema debe ser sostenible y la reforma debe ser equitativa. Afirma que los aportes de los colombianos no se están ahorrando sino que se usan para pagar pensiones.
Sergio Clavijo, director de Anif, afirma que incrementar la edad de pensión es complejo para las personas, pero equitativo para el sistema pensional nacional. El dirigente dice que el régimen de prima media es inequitativo y genera presión sobre el gasto público por los grandes subsidios que otorga.
Mientras la edad de jubilación de las mujeres pasaría de 57 a 62 años, la de los hombres pasaría de 62 a 67.
Previo a una reforma pensional, el Gobierno debe hacer la tarea de formalizar tanto a los trabajadores de entidades estatales como a los de las privadas. Este es el pensamiento de las centrales obreras, frente a la posición del Banco de la República, entidad que le apuesta a reformas estructurales.
Durante la presentación del informe de perspectivas económicas del Banco de la República, el gerente del emisor, Juan José Echavarría, señaló que en Colombia es necesaria una reforma pensional para estimular el crecimiento económico del país e incentivar el ahorro en los colombianos.
En el panel ‘Cambio demográfico, informalidad y pensiones’, el viceministro Francisco Mejía, expuso temas como protección a la vejez, desempleo y seguridad social. El Gobierno adelanta programas que benefician el sistema pensional colombiano como la unificación de historias laborales y la afiliación única electrónica.
Santiago Montenegro, presidente de la entidad, así lo aseguró al afirmar que la realidad demográfica y laboral del país hacen que el régimen público sea insostenible.
Desde el punto de vista de Iván Daniel Jaramillo Jassir, las reglas estructurales del sistema pensional no han logrado un consenso entre los actores políticos, financieros, laborales y académicos, lo que ha determinado el naufragio de las diferentes iniciativas propuestas para una posible reforma en este aspecto.