Diego Peralta asegura que quienes se van a graduar como contadores públicos deben conocer para qué sirve la Junta Central de Contadores.
Para él, si esta entidad fuera independiente del Estado, se podría fortalecer más la profesión, crecería y ofrecería más de lo que da hoy.
Diego Peralta Borray, representante de las instituciones de educación superior en el Tribunal Disciplinario de la Junta Central de Contadores –JCC–, afirma que se debe mejorar la comunicación que existe hoy entre esta entidad y los contadores públicos colombianos:
El contador no se puede sentir solo, sino acompañado. Independientemente de las funciones que realiza el Tribunal Disciplinario de la Junta Central de Contadores, tenemos que ser canalizadores de diálogo y desde las universidades se puede empezar esto. Quienes se van a graduar deben conocer para qué sirve la Junta y el Tribunal Disciplinario.
Para él, los contadores públicos necesitamos que la JCC nos dé la información que necesitamos conocer y que nos acompañe en todos los procesos. «Tenemos que acercarnos como Tribunal a los contadores», dice Peralta.
Hoy por hoy Peralta no ve viable separar la JCC del Estado, pero es consciente de que funcionaría mejor de forma autónoma.
Depender del Ministerio de Comercio no es bueno, porque se carece de cierto poder de decisión. Además, se cuenta con pocos recursos. Si se quiere fortalecer la profesión como un ente autónomo, debería ser independiente, así podría crecer y ofrecer mucho más de lo que da ahora.
El tema de las habilidades blandas del contador público se ha convertido en todo un reto desde el punto de vista de Peralta. «Hoy el contador público debe estar al mismo nivel de un gerente y más si se desempeña como un revisor fiscal o auditor», piensa.
Resalta que las universidades con el tiempo han ido implementando en sus programas la enseñanza de las habilidades blandas. «Aspectos como trabajar en equipo, saber asociarse y la cohesión nos hace falta. Es un reto y una necesidad», opina.
Peralta tiene claro que ya está rezagado el profesional contable que no apueste a temas como el big data y la analítica de datos. «Por ejemplo, con el blockchain se vienen observando cambios y esto afectará la parte contable, más cuando todos los días se escuchan noticias que tienen que ver con criptomonedas. Los contadores tendremos que aprender sobre este tema», señala.
Poco a poco hay que ir evolucionando. Nos vamos a rezagar más si no queremos aprender sobre este nuevo mundo.
A los contadores públicos que tienen aspiraciones políticas en las elecciones de marzo de este año les dice que ayuden a impulsar a fortalecer la profesión del contador público: «Que el proyecto de ley sea una realidad y la ley salga para que nos fortalezca como profesión. Somos garantes de la fe pública y esto nos ayudará».