Adoptar un sistema de finanzas abiertas permite que nuevos actores ofrezcan productos y servicios financieros innovadores a más personas y empresas.
El Gobierno, Asobancaria y la Superfinanciera están en sintonía para lograrlo.
El Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026 dio el aval para la banca abierta.
El sistema financiero en Colombia está experimentando una profunda transformación. La regulación e implementación del sistema de finanzas abiertas, conocido como open finance, es uno de los principales cambios destinados a que se cierre más la brecha en inclusión financiera en todas sus dimensiones.
La Asobancaria, en su semanario B&E, Finanzas abiertas e inclusión financiera, destaca los pasos que se han venido dando en Colombia para potencializar las finanzas abiertas como una herramienta en busca de que todos los actores financieros ganen.
Para la entidad, la adopción de este sistema habilita a nuevos actores para que ofrezcan productos y servicios financieros innovadores a más personas y empresas, gracias a la disponibilidad de más información financiera y transaccional.
Según la Superfinanciera, al cierre de 2021, el 44 % de entidades financieras tradicionales ya contaba con alianzas bilaterales, el 38 % participaba en ecosistemas digitales de terceros, el 26 % lideraba ecosistemas y el 14 % desarrollaba API abiertas para que terceros ofrezcan algunos servicios de su institución apalancados en el sistema de banca abierta.
En lo referente a la normativa sobre el tema, el Decreto 1297 de 2022 estableció el sistema de open finance voluntario en Colombia. Al respecto, la Superfinanciera debe implementar y establecer las reglas generales en seguridad, interoperabilidad y competencia, así como las reglas particulares en cada caso de uso, empezando por el de iniciación de pagos.
En este sentido, la Hoja de Ruta de Finanzas Abiertas 2022-2026, liderada por esta entidad, incluye la definición de los estándares generales de arquitectura, seguridad y ambiente tecnológico, y la generación de estándares particulares según el caso de uso y mecanismos de monitoreo.
Cabe mencionar entonces que el papel que desempeñan las autoridades de regulación y supervisión es clave para impulsar la innovación en el sistema financiero, fomentando el uso de la tecnología en la cotidianidad y facilitando también la adopción de nuevos medios de pago.
La entidad, en las mesas de trabajo de finanzas abiertas, anunció que el Gobierno nacional proveerá una infraestructura pública abierta e innovadora en el open data. El cronograma se divide en tres fases:
Por su parte, el Gobierno nacional incluyó en las bases del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026 la normativa para implementar el esquema de banca abierta para la inclusión financiera, donde las entidades estatales y personas jurídicas de naturaleza privada deberán dar acceso y suministrar toda la información que pueda ser empleada para facilitar el acceso a productos y servicios financieros.
Desde el punto de vista de Tory Jackson, head of business development and strategy para Latam en Galileo Financial Technologies, las finanzas abiertas son una tendencia creciente en el mundo financiero debido a factores como la diversidad en el mercado financiero (más jugadores), lo que permite más libertad para las instituciones financieras y clientes finales:
Pueden, además, ser un catalizador para la inclusión financiera, permitiendo que audiencias históricamente excluidas accedan a servicios financieros. Esto se relaciona con la diversificación del mercado financiero, entre más jugadores, más capacidad de alcance y al mismo tiempo más personas con acceso a servicios financieros.
Es así como este concepto y estilo de vida de la banca digital puede generar nuevas oportunidades e innovaciones, abriendo la puerta a una ola de nuevos productos y servicios financieros.
La banca abierta promueve la inclusión financiera al permitir que los usuarios sean dueños de sus datos y los usen para ser elegibles para más productos financieros.
Como conclusión, desde el punto de vista de la Asobancaria:
El marco normativo claro para el desarrollo de las finanzas abiertas, su reglamentación y sincronización con la hoja de ruta de finanzas abiertas de la Superfinanciera serán cruciales para que el ecosistema financiero continúe innovando, desarrollándose y adaptándose a las necesidades de los consumidores.
De esta manera, será posible cerrar las brechas de inclusión financiera, especialmente las atadas a los niveles de financiamiento de poblaciones subatendidas que no tienen información tradicional.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
