El advenimiento de nuevas tecnologías y formas de incorporarse en el mercado hacen que distinguirse de la competencia sea cada día más difícil para las entidades que realizan ingentes esfuerzos por ocupar un lugar importante en la memoria de clientes y/o usuarios (top of mind).
La matemática financiera es una herramienta útil para la valoración y comparación económica de las diferentes operaciones que lleva a cabo la organización, lo cual implica que, en el uso de los nuevos marcos normativos, se tengan que aplicar diversos conceptos financieros.
En este editorial mencionaremos cómo funciona el interés compuesto, qué fórmulas se utilizan para el cálculo de sus variables, cuál es su función en el argot financiero y algunos casos prácticos que permiten identificar la diferencia que presenta con relación al interés simple.
El interés es la contraprestación que se espera pagar o recibir en relación al uso del dinero. En este editorial mencionamos las generalidades del interés, cómo funciona el interés simple, qué variables se relacionan en su cálculo y algunos casos prácticos con base en estos conceptos.