Los contadores públicos enfrentan amenazas que pueden dificultar el cumplimiento de los principios éticos de la profesión.
Cada contador debe examinar estas amenazas y establecer las debidas salvaguardas cuando sea necesario.
A continuación, examinamos algunos ejemplos al respecto.
En este editorial se estudiarán las amenazas contra el cumplimiento de los principios éticos de la profesión contable, así como las salvaguardas que puede establecer el contador público para contrarrestarlas.
Además, se comentarán algunos ejemplos que le permitirán al contador público identificar dichas amenazas y establecer las salvaguardas apropiadas.
Para empezar, debemos tener presente que los principios éticos de la profesión se encuentran estipulados en el artículo 37 de la Ley 43 de 1990 y la sección 100 del anexo 4 del DUR 2420 de 2015.
El artículo 1.2.1.6 del DUR 2420 de 2015 menciona que los contadores públicos deben aplicar de manera conjunta el contenido de la Ley 43 de 1990 y el anexo 4.1 de este decreto, como se muestra en la siguiente imagen:
Las amenazas son situaciones que enfrenta el contador público en el ejercicio de sus encargos, las cuales pueden afectar el cumplimiento de los principios éticos de la profesión.
Es importante tener en cuenta que las amenazas pueden surgir tanto antes de aceptar el encargo como durante su ejecución, por lo cual se deben evaluar continuamente.
En el siguiente video, el Dr. Roberto Valencia, especialista en Estándares Internacionales, explica aspectos de la detección de amenazas a los principios éticos de la profesión
El Código de Ética de la IFAC, compilado en el DUR 2420 de 2015, establece 5 clases de amenazas:
Las salvaguardas son medidas que puede tomar el contador público cuando detecta una amenaza contra el cumplimiento de uno o varios de los principios éticos. Tienen el objetivo de reducir o eliminar dicha amenaza.
El Código de Ética de la IFAC señala que se pueden establecer 2 tipos de salvaguardas:
Las amenazas que pueden surgir en un encargo dependen de su alcance, por eso no es posible encontrar en los códigos de ética una descripción de todas las situaciones que pueden generar amenazas de incumplimientos de los principios de ética. En ese sentido, es necesario que el contador evalúe el contexto del encargo que desarrollará y utilice su juicio profesional para establecer la salvaguarda adecuada para cada posible amenaza.
No en todos los casos es posible que el contador establezca salvaguardas para reducir o eliminar las amenazas que se presenten en sus encargos. Esto es así porque en ocasiones la amenaza es tan grande que el profesional no tiene otro camino que apartarse del encargo.
Una vez identificadas las amenazas, el contador público debe evaluar si son significativas; es decir, si tendrían un impacto material en el desarrollo del encargo porque pueden condicionar la objetividad, la independencia y la calidad con las que realizaría su trabajo.
Si las amenazas son significativas, debe diseñar las salvaguardas que considere necesarias para eliminarlas o reducirlas a un nivel aceptable según su juicio profesional. Cuando esto no sea posible, deberá rehusarse al encargo o a continuar con este.
Los siguientes son algunos ejemplos de amenazas con las correspondientes salvaguardas que puede implementar el contador público. Veamos:
Uno de los asistentes del revisor fiscal tiene una relación sentimental con el contador de la entidad.
Amenaza: en este caso se presentan amenazas de interés propio y de familiaridad, debido a que la cercanía del asistente con el contador de su cliente puede afectar la objetividad con la que el revisor fiscal realiza su trabajo.
Salvaguarda: una posible salvaguarda puede consistir en apartar a este asistente del encargo y delegar sus funciones a otro.
El revisor fiscal participa en la determinación de una política contable de uno de sus clientes.
Amenaza: esta situación podría generar una amenaza de autorrevisión, toda vez que el revisor fiscal está realizando funciones que le corresponden a la administración de la entidad. Esto implica que, en el futuro, el revisor fiscal deba examinar su propio trabajo.
Salvaguarda: una posible salvaguarda puede consistir en establecer limites a las asesorías que como profesional les puede realizar a los clientes.
Una firma se dedica a prestar servicios de outsourcing contable y revisoría fiscal. Uno de sus clientes del área de outsourcing contable le solicita que también empiece a prestarle servicios de revisoría fiscal.
Amenaza: debido a que la firma presta servicios de outsourcing contable, al momento en que el cliente le solicite que también le preste servicios de revisoría fiscal podría originarse una amenaza de autorrevisión o de interés propio.
Para definir la existencia de la amenaza, la firma debe evaluar si es posible separar ambas funciones, de forma que ambos servicios sean prestados por equipos independientes.
Salvaguarda: una posible salvaguarda es establecer un revisor que evalúe el trabajo del equipo de la revisoría fiscal.
Amplía este tema consultando nuestro Especial Lineamientos del Código de Ética del contador público. Allí te contamos los puntos más relevantes sobre el Código de Ética que rige al profesional contable.