Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Mariam Bermúdez afirma que los nuevos modelos de trabajo de la auditoría permiten que exista una falta de interacción entre colegas, menos cohesión cultural de equipo y mayor exposición al fraude.
¿Qué perspectivas hay para la auditoría con estas nuevas formas de trabajo? ¿Un nuevo plan de auditoría?
Mariam Bermúdez, gerente de auditoría de Russell Bedford Costa Rica, explica en #ConferenciasActualícese todo lo que rodea el término de erosión cultural aplicado a la auditoría y cómo este está impactando los nuevos modelos de trabajo del auditor.
Afirma que la erosión cultural nace de un análisis realizado por la Confederación Europea de Institutos de Auditores Internos, el cual se encuentra dirigido a estos profesionales, pero es de vital importancia que los auditores externos tengan conocimiento sobre este tema.
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Todo auditor interno debe considerar temas de actualidad como la ciberseguridad, el capital humano, la continuidad de negocio, la liquidez y solvencia, la sostenibilidad y la cultura organizacional.
La pandemia ha creado una erosión cultural donde se han tenido que crear modelos operativos remotos y/o híbridos. Los trabajos administrativos en áreas como contabilidad, finanzas, economía, mercadeo y demás han optado por el trabajo remoto, con el fin de cuidar la salud del personal y poder sobrellevar las restricciones ocurridas por la pandemia.
De igual manera, las expectativas laborales, beneficios inesperados y aspiración del personal también han cambiado a raíz de la pandemia, por lo cual, cada una de estas prácticas ha venido cambiando y generando un nuevo rumbo en las dinámicas de trabajo de las organizaciones.
El análisis realizado por la Confederación Europea de Institutos de Auditores Internos también reveló que el 82 % de los altos ejecutivos mencionaron que, ante las nuevas prácticas laborales, los niveles de productividad se mantuvieron estables o aumentaron.
El estudio también reveló que más del 50 % de los trabajadores cree que el trabajo remoto llegó para quedarse. Además, el 47 % de estos trabajadores está menos enfocado en su carrera.
Bermúdez, miembro del Colegio de Contadores Públicos de Costa Rica, explica algunas de las desventajas que ha traído el trabajo a distancia. En primer lugar, podemos encontrar la incorrecta gestión de la confidencialidad de la información.
Para esta primera desventaja, afirma que todavía no se ha creado un mecanismo para poder brindar confidencialidad de la información. Hoy por hoy, es difícil controlar la información que almacena el colaborador mientras trabaja para la organización, por lo que no se tiene la plena seguridad de que la información que se le encarga pueda ser divulgada o no.
Otra de las desventajas que menciona Bermúdez es la revisión tardía o nula de los registros generados por el personal. En este punto explica que cuando se tiene mucho personal a cargo es más difícil asumir la responsabilidad de realizar la revisión y la supervisión de los trabajos realizados por este.
Una desventaja más son los problemas tecnológicos relacionados con las fallas de la conexión a internet. Sin duda, en muchas ocasiones ha pasado que los colaboradores han tenido este tipo de inconvenientes y cada vez puede ser más frecuente en reuniones o espacios de comunicación importantes.
Finalmente, aunque no les ha pasado a todos, tenemos la falta de concentración en este escenario, ya que durante el trabajo remoto desde casa o cualquier sitio público estamos expuestos a desconcentraciones que puedan interrumpir nuestro trabajo y nos pueden quitar tiempo.
Bermúdez menciona que hay una falta de interacción entre los colegas, lo que significa que hay menos cohesión cultural del equipo y la cultura organizacional puede disminuir.
Adicionalmente manifiesta que el riesgo que puede existir con estas nuevas prácticas laborales se arraiga en que el personal puede perder el sentido de pertenencia por la organización.
Este tipo de nuevas prácticas laborales puede traer consigo menos conexión con la organización y que el colaborador esté más expuesto al fraude y otras malas conductas, las cuales pueden afectar a la organización. En muchas ocasiones se puede observar que el trabajador pierde su sentido de lealtad y antepone sus propios intereses.
Por lo anterior, Bermúdez invita a toda la comunidad de altos ejecutivos y gerentes a repensar y analizar cómo sus colaboradores se están comportando con estas nuevas prácticas laborales y de qué manera pueden cambiarlas o potenciarlas, con el objetivo de beneficiar cada vez más a la organización.
Frente al anterior escenario, ¿cuáles son las perspectivas de la auditoría? Bermúdez indica que son dos. La primera de ellas es la evaluación del debilitamiento moral del personal, la motivación y la salud cultural general de la empresa. La segunda va encaminada por las evaluaciones de riesgo y los controles, y el impacto actual de los resultados.
Para la primera, Bermúdez plantea que se deben ajustar evaluaciones de desempeño, entrevistas al personal, encuestas del clima organizacional y técnicas de las ciencias del comportamiento. Las pruebas de personalidad y dinámicas grupales pueden ayudar a realizar la evaluación del debilitamiento moral del personal.
Por otro lado, para las evaluaciones de riesgo y los controles, plantea que se deben determinar las alteraciones de los indicadores representativos de la actividad a evaluar, así como detectar situaciones anómalas que denoten deficiencias y finalmente evitar concentrarse en áreas tradicionales de riesgo.
Desde el área de recursos humanos, el auditor debería solicitar las evaluaciones de antecedentes del personal, los cambios en los estilos de vida de los empleados, evaluar los programas de compensación e incentivos, y los programas de promoción de los valores centrales de la organización.
Desde el lado del plan de auditoría para el área financiera, el auditor deberá realizar evaluación de controles internos, identificación de los riesgos, detectar transacciones sospechosas e incidentes repetitivos que hayan sucedido en el área o en la organización.
Finalmente, Mariam Bermúdez invita a todos los jefes y gerentes a valorar la productividad, la lealtad y el compromiso de sus colaboradores, de igual manera a realizar una constante evaluación de su bienestar desde estos nuevos modelos de trabajo, ya sean remotos o híbridos.
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