Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
El CTCP reconoce el creciente uso de criptoactivos como bitcoin y ethereum, y resalta la importancia de comprender su tratamiento contable.
A los contadores parece no interesarles aumentar sus habilidades de contabilidad de criptomonedas.
Inversores necesitarán que los contadores estén bien versados en criptomonedas.
Pese a que las criptomonedas son un tema del cual todos los días vemos noticias por su movimiento a nivel financiero, la volatilidad de las mismas y los riesgos que pueden traer en sus operaciones son puntos que a los contadores públicos parece no interesarles.
Una investigación realizada por Recap, plataforma generadora de reportes de criptoactivos, mediante la página Cointelegraph en español ha revelado una falta de interés global por parte de los contadores en cuanto a perfeccionar sus habilidades en criptomonedas:
La investigación se encargó de analizar los datos de búsqueda de Google para mostrar que el apetito global de los contadores que buscan involucrarse con las criptomonedas ha disminuido un 3 % en los últimos tres meses a nivel mundial, y un 14 % respecto al año anterior.
A estos profesionales se les preguntó si se sienten interesados en aumentar sus habilidades de contabilidad de criptomonedas. Solo el 9 % respondió que sí.
Recientemente, el Consejo Técnico de la Contaduría Pública –CTCP– publicó su Orientación Técnica 20, enfocada en criptoactivos. De esta forma, queda demostrado que la entidad reconoce el creciente uso de criptoactivos como bitcoin y ethereum, y resalta la importancia de comprender su tratamiento contable.
El objetivo de esta orientación es contar con directrices para la valoración, reconocimiento, medición y revelación de criptoactivos en los estados financieros de las organizaciones. Aquí se encuentra el reconocimiento de este tipo de activos, su manejo y los asuntos derivados de auditorías relacionadas con estas transacciones.
Esta orientación técnica establece que los criptoactivos deben clasificarse como activos intangibles, y se recomienda utilizar el modelo del costo para su reconocimiento inicial. Además, se detallan los criterios para la valoración posterior de los criptoactivos, dependiendo de su naturaleza y uso.
Cabe recordar que recientemente la OCDE confirmó que se adoptará el Marco de Informes de Criptoactivos como estándar internacional para proporcionar informes fiscales completos sobre transacciones de criptomonedas en los países del G20.
Por otro lado, desde la Unión Europea se busca que, a través de una ley, las empresas de criptomonedas divulguen los detalles de las tenencias de sus clientes a las autoridades fiscales.
Álvaro Patiño, contador público, CEO de Hispanic Financial Tax, afirma que uno de los conceptos que deben desmitificar los profesionales contables es el de criptoactivos.
Recuerda que en el 2017 la Dian se manifestó sobre el tema a través de un concepto. Además, desde hace 5 años el tema central del Congreso Mundial de Contadores giró alrededor de la siguiente pregunta: ¿cómo el cambio digital afectará los negocios y específicamente a los profesionales de la contaduría pública?
Por lo anterior, el ecosistema de los criptoactivos no debe ser ajeno a la profesión contable.
No se trata de convertirse en expertos en monedas digitales. Lo que se debe tener en cuenta es cómo se manejan, cómo se registran y cómo se revelan en los estados financieros; además, es necesario conocer los efectos que tienen en la parte fiscal y tributaria.
Daniel Howitt, cofundador y director ejecutivo de Recap, manifestó que «podría tratarse de ignorancia, arrogancia, pero el contador tiene el deber de representar al cliente de manera eficiente y eficaz».
Para él, a medida que se sigan conociendo regulaciones en esta industria, los inversores necesitarán que sus contadores estén bien versados en criptomonedas. En una industria complicada, deben poder administrar fácilmente sus activos digitales y sus asuntos fiscales.
Las criptomonedas son una oportunidad real para los contadores. Con el software de impuestos criptográficos adecuado, tiene sentido comercial que los contadores estén capacitados y comprendan el mercado para ayudar a sus clientes.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
