Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Para Eduard García Rosicart, las nuevas generaciones están adoptando naturalmente las criptomonedas y el blockchain como las anteriores adoptaron el dinero plástico para realizar pagos.
El blockchain puede proteger la privacidad de las personas y la manera de hacer negocios y cerrar acuerdos.
Hoy se habla a diario de las criptomonedas. Han cobrado tal importancia que hasta cruzaron la barrera de ser consideradas como moneda nacional en países como El Salvador. Sin embargo, en los pasados meses nos dimos cuenta de cómo su valor cayó en el mercado.
A inicios de este año el bitcoin perdió el 17 % de su valor, mientras que ethereum cayó más del 13 %. Pese a que el mercado de los criptoactivos reportó nuevamente una ligera alza en su valor, no es suficiente para calmar la incertidumbre que se presenta en el sector.
Eduard García Rosicart, docente de Marketing Digital en OBS Business School, en su informe Criptomonedas y blockchain afirma:
Con sus subidas y bajadas, el blockchain y las criptomonedas llegaron para quedarse, están cambiando el mundo y no solo se han incorporado a las tecnologías relacionadas con la Inteligencia Artificial, el Big Data y el Internet de las Cosas, sino que las elevan a un nuevo nivel.
Las nuevas generaciones están adoptando naturalmente la criptomoneda y el uso del blockchain como las anteriores adoptaron el dinero plástico para pagar en un supermercado. Esto es consecuencia del acelerado y constante desarrollo tecnológico que ha generado una cultura de adopción innovadora sin precedentes.
Este contexto, dice García Rosicart, es el escenario perfecto para la actividad empresarial, y ofrece a grandes, medianas y pequeñas compañías la posibilidad de obtener una nueva posición en un mercado que marcará la diferencia en nuestras vidas en los próximos años.
La publicidad en los medios digitales y el sueño de que cualquier persona pueda invertir cómoda y fácilmente desde su casa han puesto el blockchain en los ojos de la gran mayoría de la población.
Blockchain puede cambiar nuestras ciudades, proteger la privacidad de las personas, la manera de hacer negocios y cerrar acuerdos, los sistemas de producción y supervisión en fábricas, hacer más eficientes y seguros los entornos agrícolas, etc.
Las propiedades del blockchain para gestionar datos y ser incorruptible convierten a esta tecnología en la herramienta perfecta para generar modelos de datos sostenibles e inviolables. Así, se convierte en la pieza clave de empresas, nuevos servicios y soluciones que probablemente solo algunos innovadores son capaces de vislumbrar.En el informe se describe que por ahora el uso más frecuente que se les da a estas tecnologías es en el ámbito económico, como métodos de pago alternativos al dinero tradicional.
Además, actualmente estas tecnologías se utilizan para:
La tecnología blockchain apuesta por una sociedad descentralizada que permita la conexión de las personas por igual. Este sistema sigue en desarrollo e investigación con el fin de plantear su posible implementación en otros procesos, como en votaciones, en asuntos de justicia, en la educación, en registros médicos, en la economía y en otros ámbitos que permitan diseñar una sociedad más transparente y democrática.
García Rosicart afirma que en el futuro cada persona será su propio centro y parte de una red que se coordinará para diseñar una sociedad más equitativa.
El futuro del blockchain se ve claro en dos escenarios: uno que incluye las aplicaciones que necesitan de redes descentralizadas y seguras, como los contratos inteligentes; y otro en el que se prometen avances en el desarrollo de la inteligencia artificial.
Estos enfoques buscan mantener la seguridad e integridad de los datos compartidos y optimizar la descentralización de dicha información. Esto significa que las personas tendrán control sobre sus datos y podrán decidir cuándo y cómo ponerlos a disposición de terceros.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
